Pablo Rochi

Fueron muchos los factores por los cuales Atlético Paraná logró una campaña muy buena en su reciente participación en el Nacional B de fútbol. Desde un principio, el mensaje siempre fue claro, preciso y contundente: llegar a los 51 puntos como gran desafío.

El Decano no solo alcanzó ese puntaje, sino que lo superó, siendo que su primera vez en esta divisional finalizó con 58 unidades.

Justamente, uno de sus pilares en esta participación tuvo que ver con el rendimiento individual de sus jugadores. Muchos de ellos experimentaron por primera vez jugar en la segunda divisional del fútbol argentino; sin embargo lo hicieron muy bien, pisando fuerte en un campeonato en el cual no es sencillo consolidarse.

En este marco, una de las grandes satisfacciones fue la gran tarea de Martín Galli, quien desde la última línea defensiva se erigió como uno de los puntales en la estructura planteada por el entrenador Edgardo Cervilla.

Galli, desde el puesto de lateral, tuvo una producción sumamente interesante, siendo una de las gratas revelaciones del certamen. Su rendimiento se hizo notar, no solo por ser uno de los mejores de su equipo, sino porque en su puesto fue uno de los jugadores más reconocidos.

A todo ello, el futbolista tuvo una particularidad por demás llamativa. Fue quien convirtió el primer gol de Paraná en su llegada al Nacional B y también fue el último en anotar en la temporada. Galli hizo el primer tanto en el debut ante Ferro y anotó en el reciente clásico ante Patronato, en la última fecha del campeonato.
Asimismo, a pesar de ser defensor, se transformó en uno de los goleadores del equipo, lo que demuestra la gran temporada que tuvo.

—En lo personal y en lo colectivo tuviste una temporada de muchas satisfacciones. No creo que en el comienzo del campeonato hayas imaginado un final del año con esta dicha.
—Uno siempre desea lo mejor, pero también debe prepararse para todo. Pero sí, fue una temporada increíble, muy buena, por eso ahora estoy disfrutando, descansando y compartiendo este momento con mi familia. Igual, más que contento por mí, en realidad lo estoy por todo el grupo, que se brindó al máximo para haber finalizado hoy una gran temporada. Entiendo que superó las expectativas de todos. De nosotros, del cuerpo técnico, de los dirigentes y de los hinchas. Si bien sabíamos que iba a ser un torneo muy duro, entiendo que estuvimos a la altura de las circunstancias y superamos lo que nos propusimos desde un principio. Fuimos un equipo que hasta la última fecha peleó por objetivos grandes, como el de intentar llegar a un lugar por el ascenso.

(Más información en la edición gráfica número 1033 de ANALISIS del jueves 19 de noviembre de 2015)