En las primeras 72 horas de aplicación de la medida que dispuso la quita del IVA para productos de la canasta básica dirigida al consumidor final, los precios en las góndolas bajaron entre un 15 y un 18%, de acuerdo con el director nacional de Defensa del Consumidor, Fernando Blanco Muiño.

"No es que por restarle el 21% de IVA, baja un 21% el precio del producto. Porque el precio final tiene también otros componentes, como los impuestos provinciales y las tasas municipales", explicó el funcionario en diálogo con La Nación.

En tanto, según una recorrida de este diario, las bajas promediaban 17%. En una importante cadena, por ejemplo, los fideos spaghetti y los tallarines Matarazzo por 500 gramos (fideo largo) pasaron de costar 54 a 44,60 pesos; la leche descremada La Serenísima por 1 litro, de $46,70 a $38,60; el puré de tomate La Campagnola (en tetra pack) por 520 gramos, pasó de 30,30 a 25, y el arroz largo fino 00000 Gallo bolsa por 500 gramos, que se conseguía a 33,90 pesos, ahora se ubica en 28.

Consultado acerca de si los productos de Precios Cuidados y Esenciales estaban alcanzados por la disposición, Blanco Muiño dijo que sí, ya que la medida que se anunció en la semana es de alcance general sin importar si forman parte de un programa. "Para todos los productos, la obligación es que en la línea de cajas no tengan la alícuota IVA. Es obligatorio sacar el 21% o el 10,5% en el caso de la leche. Si el supermercado o comercio decide promocionar algo no es excusa. Ese es el criterio general", afirmó.

Sin embargo, La Nación constató que los precios de los Productos Esenciales aún son los mismos. Una negociación entre los proveedores y el Gobierno sería el motivo de esos precios: los empresarios no trasladarían los efectos de la devaluación y se compensarán con el IVA.

En abril pasado, cuando se conoció el congelamiento de precios de 64 productos por 180 días, también trascendió que el acuerdo había sido producto de un "pacto de caballeros" al que adhirieron de manera voluntaria los líderes de las compañías. Pero todo estaba atado a que el dólar no se disparara por encima del tope de la banda cambiaria que en ese momento era $51,45. El viernes pasado el dólar cerró a $58,12, según el promedio que realiza el Banco Central, después de tocar máximos en $62 en la semana.

En cuanto a la señalética, es distinta de acuerdo con el supermercado, ya que, según Blanco Muiño, no están obligados a colocar carteles como en Precios Cuidados y Productos Esenciales, sino que cada cual tomará sus decisiones comerciales. Consideró que el acatamiento era alto y que la colocación de los carteles dependerá de la cadena.

El viernes pasado se publicó el decreto que estableció una baja temporaria a cero del IVA hasta el 31 de diciembre sobre 14 rubros de alimentos que forman parte de la canasta básica. Los productos alcanzados son pan, leche, aceite de girasol y mezcla, pastas secas, arroz, harina de trigo, polenta, rebozador y pan rallado, yerba mate, mate cocido y té, conservas de frutas, hortalizas y legumbres, yogures y azúcar.