
La empresa Celulosa Argentina que era controlada por Fanapel, una firma uruguaya, regresó a manos nacionales. La compañía fue comprada por el Grupo Tapebicuá, que tiene sedes en Corrientes y Tierra del Fuego. Este grupo foresto-industrial nacional emplea a más de 1.000 trabajadores y factura 110 millones de pesos al año, pero a partir de la operación efectuada su facturación se elevará a 745 millones anuales, con dos nuevos centros industriales.
La operación será llevada a cabo por el Grupo Tapebicuá, que cuenta con plantas en Corrientes y Tierra del Fuego, por un valor de 45 millones de dólares para la adquisición del 54 por ciento de Fanapel, la empresa de la familia uruguaya Calcagno que controlaba Celulosa.
La firma Celulosa Argentina, fundada en 1929, se dedica a la producción de pastas y papeles para impresión y escritura y posee dos plantas industriales en Capitán Bermúdez, Santa Fe y en Zárate, Buenos Aires. Según publicó Infobae, la facturación anual de la empresa ronda 450 millones de pesos y emplea a 700 personas.
La operación de Celulosa Argentina, elevará la facturación de Tapebicuá a 745 millones anuales, con dos nuevos centros industriales que se suman a los de Virasoro y Establecimiento Industrial San Charbel, en Corrientes y Establecimiento Industrial Bronzovich/Lago Escondido, en Tierra del Fuego.