Tras el aumento de precios desatado el mes pasado con las verduras y hortalizas, ahora el incremento llegó a las harinas y amenaza con llevar el precio del pan y sus productos derivados a sumas impensadas meses atrás. La situación fue advertida ayer por un grupo de panaderos de la ciudad que explicaron que desde hace tres meses todos los productos llegan hasta un 150 por ciento más de costo. La suba constante del valor de algunos insumos de panadería, como la harina, elevaron el precio del kilo de pan en algunas panaderías céntricas de 2,80 a 3,50 pesos. Mientras en los barrios el costo se alteró de 2 pesos a 2,60 y 2,80 según el comercio.
Desde el sector revelaron que materias primas como las grasas, las margarinas y el aceite aumentaron un 100 por ciento en los últimos meses. Según un empresario del rubro, la bolsa de harina de 50 kilos que era vendida a los panaderos a 35 pesos hace tres meses, ahora pasó a costar entre 50 y 55 pesos, pero se estima que el próximo mes llegue a 60 pesos.
Según la zona
Los precios varían según la ubicación del local. En el microcentro y en los barrios el aumento fue del 20 por ciento. Sin embargo, en la periferia el valor del kilo de pan no cruzó aún la barrera de los 3 pesos.
En tanto, en la zona norte, sur, el incremento es del 10 por ciento. Sin embargo, hay panaderías céntricas que soportan el embate de la suba del precio ofreciendo el kilo de pan a 2,50, realizando una pequeña alteración en el costo cercana al 10 por ciento.
Los comerciantes coincidieron que todo comenzó hace tres meses. “Los precios de los insumos se dispararon y nos resulta imposible sostener el comercio”, dijo un comerciante. “Acá hay que pagar impuestos, empleados y comprar las cosas para hacer el pan”, señaló el panadero intentando justificar el incremento en los precios.
Otro golpe al bolsillo
Ninguno de los comerciantes del rubro consultados por Uno se animó a decir que este alimento básico de la canasta alimenticia no volverá a padecer un nuevo incremento en las semanas venideras, lo que representará otro golpe para los ya magros y devaluados bolsillos de sus consumidores.
“Es inviable seguir manteniendo los precios con el constante incremento que registra la harina y otros insumos”, fue la frase repetida por los panaderos que en su mayoría hablaron de una inflación insostenible.
A la vez, puntualizaron que el aumento puede volver a repetirse en un futuro cercano. “Es imposible absorber el incremento de los insumos. No podemos aguantar más. Por ejemplo, el kilo de grasa se fue por las nueves”, destacó uno de los empresarios consultados. En pocas palabras los panaderos confirmaron que “el precio de la harina seguirá subiendo y por ende el pan también, ya que existen muchos molinos que no entregan harina porque, a pesar del aumento, no pueden recuperar el dinero invertido en su procesamiento”.
