Paraná: pidieron condena para un joven que era menor de edad cuando asesinó a una mujer

La víctima, Irma Villagra, de 72 años, se domiciliaba en calle Díaz Vélez al 1.100, a pocos metros de Vucetich, muy cerca de donde solían reunirse jóvenes, varios de ellos menores de edad al momento del hecho, quienes acostumbraban a juntarse para drogarse, beber alcohol y planificar –según quedó en claro en la audiencia- algunos robos menores, con la finalidad de adquirir la droga que consumían.

Durante las tres jornadas que duró el juicio, Romero y Alvarenga –defendidos por los abogados Gómez del Río y Pedemonte- se acusaron mutuamente, pero las pruebas materiales y los testigos terminaron inclinando el peso de la culpa en Romero, quien aquel día, en horas de la siesta, después de haber consumido cocaína, marihuana y vino, en una plaza ubicada en la esquina de calles Almirante Brown y Díaz Vélez, ingresó a robar a la casa de la septuagenaria, con la intención de lograr dinero para ir a un recital del grupo de rock La Renga, que actuaba en Santa Fe.

Consultado por El Diario, el querellante en representación del hijo de la víctima, doctor Marcos Rodríguez Allende, informó: “Finalmente, este viernes terminamos el debate con las conclusiones de esta tremenda causa en la cual tanto Fiscalía y querella demostramos sobradamente a través de las diferentes probanzas objetivas –huellas dactilares, un buzo con sangre- y testimoniales, que Romero, quien al momento del ilícito tenía 17 años, ingresó a la casa de la señora Villagra el 28 de abril de 2007 y previo a apoderarse de objetos de la misma, procedió a golpearla salvajemente en la cara y el cuerpo hasta matarla”.

“Las constancias nos indican que Villagra, al momento de la aparición sorpresiva de Romero se hallaba acostada e incluso el imputado le bajó su bombacha y hasta podemos elucubrar que quiso abusar de la misma, pero dada la oposición con un forcejeo desesperado realizado por la víctima, el imputado optó por golpearla salvajemente y estrangularla, hasta provocar su fallecimiento”, expresó.

Quedó suficientemente probado que dichos golpes fueron en vida y hasta causar su agonía, dejando marcas de brutales hematomas en su rostro, dando la pauta del sufrimiento ocasionado a la víctima.

Finalizada la etapa de los alegatos, el Tribunal adelantará la sentencia el martes a las 11, pero no le corresponde al mismo pautar el monto de la pena, sino sólo confirmar si declarara la responsabilidad del acto por parte de Romero, quien al momento de ocurrido el crimen era menor de edad. De considerarlo responsable del ilícito se girará inmediatamente la sentencia a la jueza de Menores la que deberá determinar la pena que debe cumplir el imputado, el cual ya alcanzó su mayoría de edad.

Para ilustrar sobre cómo es este procedimiento, el querellante detalló: “En su momento, se le dictó al acusado -que nosotros consideramos autor de este hecho- lo que se denomina un auto de responsabilidad y se esperó a que alcance la mayoría de edad para juzgarlo en plenario oral y público”

Finalmente, Rodríguez Allende opinó en referencia a la pena que debería corresponderle por este crimen que “dadas las características del ilícito, las circunstancias y los elementos agravantes del acto cometido por Romero, el mismo debería tener una pena no menor a 15 años de prisión, ya que la calificación legal fue la de robo en ocasión de homicidio, tal cual lo estipula artículo 165 del Código Penal”.

Respecto a Walter Alvarenga, el otro imputado, respondió: “En cuanto a Alvarenga, sólo hemos demostrado que poseía las llaves y que se las pudo haber dado a Romero, pero esto no alcanza para obtener el grado de certeza en cuanto a la comisión necesaria y pretender culparlo como partícipe primario del delito endilgado, ya que a criterio de esta querella no resulta acreditado fehacientemente que Alvarenga haya pretendido entrar a la casa de la víctima, no obstante la fiscal de Cámara solicitó la pena de un año de prisión”.

(Foto: El Diario)

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