Una mujer de 78 años, ciega y con problemas de movilidad, fue violada y golpeada atrozmente por un salvaje individuo - al que se habría identificado por su apodo de Chino- que ingresó a su domicilio tras voltear una puerta a patadas, en las primeras horas de la mañana del domingo. La víctima, Catalina Gálvez, vive sola en una precaria vivienda ubicada a pocas cuadras de la Comisaría de La Criolla y aunque gritó cuando era atacada, la lejanía de las casas vecinas impidió que alguien pudiera prestarle ayuda. En cuanto al presunto violador, se presume que es un joven, de 16 años, que vive a unas tres cuadras de la casa de su víctima y que ya tendría antecedentes por haber intentado violar a otra anciana de la localidad.
Al respecto, la víctima señaló que “entró un pibe y me golpeó brutalmente, casi me ahorcó poniéndome un saco en el cuello y, después, me violó”. También, remarcó que “el desgraciado me pasó eso por la boca”, tras lo que dijo que “yo no lo conocía, aunque dicen que es del barrio, pero no sé quién es, sí que es joven y me pedía la plata que si no me mataba a golpes y me empezó a dar unas trompadas enormes”, tras lo que la tiró en la cama “y me hizo de todo, yo estaba sola y gritaba, pero nadie oía porque está todo cerrado y los vecinos están todos lejos”.
Mientras el degenerado atacaba a la indefensa anciana, su exigencia crecía: “dame la plata, la plata, me decía y me llevó unos 80 pesos, me pegaba trompadas hasta que me dejó en el suelo. Habrá estado media hora”.
Por su parte, Isabel Gálvez, la sobrina de la víctima expresó que su tía “duerme solita y dice que (el violador) le rompió la puerta del costado de la casa, aparentemente a patadas, porque los golpes eran fuertes y entró este tipo, según cuenta ella, se le tiró encima de la cama, primero la violó y mientras la violaba le pegaba y le decía que si gritaba la mataba”.
Mientras llevaba a cabo su nefando accionar, el malviviente “e había envuelto un trapo en el cuello, después de finalizar el acto, según ella dice, le puso el pene en la boca y le decía que no gritara y le dijera dónde tenía la plata porque si no la mataba”.
“Ella tenía 80 pesos debajo de la almohada, en una cajita, y se la llevó. Ella quedó esperando porque, según dijo, no me quería molestar. Después abrió la puerta y yo la vi, cuando la miré creí que tenía la cara sucia - porque se sabe tiznar con una pava-, con mi marido la miramos y me vine a ver qué tenía”, manifestó.
Luego, indicó que “cuando la vi (de cerca), era un horror. La puerta estaba rota, habían volteado un banco, la casita de ella es precaria”, tras lo cual indicó que “durante el día, con mis hijas estamos con ella, cuidándola, pero de noche duerme solita”. Al comprobar que su tía había sido salvajemente agredida, “me fui a la policía, mientras tanto mi marido quedó con ella, empezó a mirar y encontró un celular, se descubrió quién era el dueño y, a partir de ahí, se tuvo una pista acerca de quién podía ser”, precisó. “Aparentemente, todos los chicos que lo han visto, lo vieron con ese celular”, manifestó.
Más adelante, indicó que su tía “es ciega, no camina casi, tiene marcapasos, problema de presión, no comprendo cómo puede haber gente que haga estas cosas porque es peor que pegarle a una criatura, ella no vio ni de dónde venían los golpes”.
En cuanto al supuesto violador, dijo que “es de acá, vive a tres cuadras, tiene 16 años y la policía está esperando la orden del juez, ya se tomaron muestras de semen y de sangre para ver si lo ponen preso, ya que además de los golpes tenía algunas lesiones en la vagina, hubo violación está comprobado. Lo comprobó el (médico forense) Dr. Mahler, del Juzgado del Menor y la Familia, además del médico del hospital Masvernat”.
“Espero que lo agarren al tipo y lo metan preso, sería una injusticia que, por ser menor, salga a la calle, a pesar de que, aparentemente, ya intentó con otra señora de edad, de acá de La Criolla, hacer lo mismo”, concluyó.
