
Igualmente, el funcionario nacional recordó que "a la hiperinflación de los '80 le siguió el hiperendeudamiento de los 90. En el 2002, la relación deuda PBI (Producto Bruto Interno) alcanzaba 166 por ciento, imposible de resistir para cualquier economía atada a los vaivenes de los mercados”.
En cambio, añadió que "el peso de la deuda sobre la economía representa sólo el 41,6 por ciento del Producto Bruto; la deuda con privados es de menos del 10 del PBI, lo que aumenta la capacidad de gestión del Estado”.
Por último, según consignó Página 12, Lorenzino explicó que de esta manera se “permite asignar más recursos a educación, obras, subsidios a los que más lo necesitan; y los servicios de pago de la deuda en moneda extranjera con privados representan anualmente sólo el 6 por ciento de las exportaciones”.