Los anestesistas en el hospital Urquiza de Concepción del Uruguay mantienen la medida de fuerza a falta de respuestas

La medida de fuerza que llevan adelante los anestesistas en el hospital Justo José de Urquiza, acción que motivó la suspensión de las cirugías programadas, se fundamenta básicamente en el reclamo por un capnógrafo, un oxímetro, cardioscopio y la regularización de los pagos que se les adeudan a algunos de estos profesionales. Hasta el momento la situación no cambió y sólo se ejecutan las operaciones de urgencia. No obstante el doctor Juan Carlos Bonelli, a cargo del servicio de anestesia, consideró que si se obtienen respuestas positivas en cuanto al equipamiento, analizarían retomar las actividades.

En ese sentido, Bonelli precisó que el reclamo por el equipamiento “data de hace mucho tiempo y el problema es que estaban realizando muchas cirugías donde la misma ley exige que haya determinados equipos porque de no contar con ellos, no se pueden hacer las neurocirugías, torácicas”.

Hay un equipo que nunca tuvo el Hospital que “es el capnógrafo, aparato que mide el dióxido de carbono en el aire expirado”. Con el oxímetro se puede medir la saturación, porcentaje, de oxígeno en la sangre; mientras que el cardioscopio se utiliza durante la operación para controlar el funcionamiento del corazón”.

Dijo además, en declaraciones a la Calle que los contratos se normalizaron hasta el 31 de diciembre de este año pero los anestesiólogos no quieren seguir bajo este régimen porque “no tienen derecho a enfermarse, ni tampoco asignaciones”, razón por la cual se pidió “la creación de los cargos para evitar que a fin de este año, vuelvan a surgir problemas”. Tampoco se terminó de solucionar la deuda con dos de estos profesionales a los que hace un año se les adeuda el salario.

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