Rosario Romero afirmó que las críticas de Urribarri a Varisco se deben a “la pasión propia del momento de épocas preelectorales”

La diputada nacional Rosario Romero (PJ-Entre Ríos) indicó que “los tiempos de campaña no son los mejores para pedir serenidad” en las declaraciones, en referencia a las críticas del ministro de Gobierno, Justicia, Educación, Obras y Servicios Públicos de la provincia, Sergio Urribarri, hacia el Presidente del Comité Provincial de la Unión Cívica Radical (UCR) y precandidato a diputado nacional, Sergio Varisco, al recordar que “está procesado y puede ser condenado por homicidio culposo agravado por abandono de persona” y asegurar que “sería bochornoso para los radicales y la provincia elegir a una persona que puede ser condenada por la mayor inconducta que pueda imaginarse”. De este modo, justificó los dichos del ministro y aseguró que hay que inscribir las opiniones “en la pasión propia del momento de épocas preelectorales”. Entendió además que “no hay que asustarse porque siempre las campañas han sido así” y bregó por “no descartar la posibilidad de sentarnos –campañas aparte- a pensar otros temas importantes”.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda emitido por Radio del Plata Paraná Romero aseguró que “los tiempos de campaña no son los mejores para pedir serenidad” en las declaraciones, pero aclaró que “siempre ha sucedido esto”. “Son opiniones y lo tenemos que inscribir allí, aunque estemos lejos de situaciones que habría que transitar en una democracia ideal”, añadió.

Además, afirmó que “los partidos están compuestos por hombres y mujeres, con posiciones, pasiones y temperamentos distintos y la campaña calienta las opiniones”, al tiempo que explicó que “lamentablemente, estamos ante dos instancias electorales: las internas abiertas y simultáneas del 7 de agosto y las legislativas de octubre, que alargarán el proceso preelectoral en el país, y los tiempos de campaña son así”.

“Son opiniones frente a determinada situación, que en el caso de Varisco no ha sido puramente ligada a lo personal, porque se mezcla con su rol político, y si le hubiera sucedido a Busti o a cualquier otro funcionario, sufriría iguales críticas porque por su rol político están más expuestos”, justificó.

Más adelante, añadió que “la opinión es libre en Argentina y no hay que dramatizar las opiniones” y resaltó la “importancia de tener en cuenta la necesidad de dar debates fundamentales, y no tirar tanto de la cuerda para el día en que haya que sentarse a discutir esos debates podamos hacerlo”. Reiteró que hay que inscribir las opiniones “en la pasión propia del momento de épocas preelectorales” y entendió que “no hay que asustarse porque siempre en las campañas ha sido así”.

Remarcó que la campaña electoral “será excesivamente larga por las internas abiertas” y admitió que “se está lejos de lo ideal, al igual que en muchísimos temas institucionales”. En ese orden, destacó que “la dirigencia tiene con los argentinos una deuda de calidad institucional hacia el futuro”, como en el caso de Entre Ríos donde “se adeuda una reforma constitucional, que no se ha dado por mezquindades y que nos resta la posibilidad de darnos una mejor institucionalidad”.

Finalmente, reflexionó: “En épocas de campaña las pasiones se acrecientan y eso es propio de los seres humanos, pero vamos en un crecimiento lento y sostenido de democracia que se soluciona con más democracia y en la provincia hubo muchos avances en este sentido, por eso no hay que descartar la posibilidad de sentarnos –campañas aparte- a pensar otros temas importantes”.

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