En la Casa de la Costa del Paraná, ubicada en el Puerto Nuevo, convocados por el intendente Sergio Varisco, representantes del gobierno provincial, funcionarios municipales y fuerzas de seguridad asistieron ayer a una reunión para abordar un diagnóstico y un plan de acción frente a los daños que generó la reciente tormenta. Se hizo una evaluación general acerca de los trabajos encarados para solucionar los problemas, la marcha de la ayuda social y cómo seguir asistiendo a las familias afectadas, en particular, por la voladura de techos. El jefe comunal sostuvo que en un par de días se estará normalizando la asistencia a quienes vieron afectadas sus viviendas y valoró el trabajo de Enersa en la reparación de cables cortados y la coordinación de tareas con el gobierno provincial, según informó la comunicación oficial de la ciudad, según publicó El Diario.

“Han pasado 24 horas luego de que se desató el temporal y en general hubo dos temas que tuvimos que trabajar fuertemente, uno el derrumbe de los árboles producto del fuerte viento y esto arrastró el cableado de la ciudad provocando la falta de luz en gran parte de la ciudad. Ahora está casi todo restablecido en cuanto al servicio eléctrico”, reseñó el intendente luego del encuentro del que participó el secretario de Gestión del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, Leonardo Centurión.

Como resultado del intercambio de información con las distintas áreas del gobierno comunal, estimó que “el cálculo es de casi 1.000 árboles caídos, para lo cual han estado trabajando intensamente todas las cuadrillas municipales y ya casi no hay calles cortadas por árboles interfiriendo el tránsito”, sostuvo. A su vez consideró que el otro tema más preocupante es la voladura de los techos. “En esto hay 250 familias empadronadas que estamos asistiendo con materiales de construcción, y en la urgencia se los ayudó con colchones y comestibles y una labor de salud pública con nuestros agentes sanitarios”.

Varisco pidió a la población un poco de paciencia “porque quizás aún no hemos llegado a todos los lugares que tuvieron problemas con los techos, pero entre hoy y mañana (por el sábado y domingo) vamos a solucionar todos los casos”.

Otro tema que abordó el jefe comunal fue el corte de agua potable que también agravó la situación en la jornada del viernes. “Al caer los árboles arrastraron el cableado y en el caso de la toma de agua -donde se extrae el agua del río para su potabilización- padecimos desde las 9 hasta las 19 la falta de luz y por lo tanto se fueron vaciando las reservas, en mayor medida, las de la planta ubicada al lado del Cristo Redentor y esto motivó que el viernes a la tarde muchos sectores no tuvieran agua. Se reparó a las 19 y en la madrugada de este sábado, ya teníamos el servicio normalizado en toda la ciudad. Le pedimos disculpas a la población, pero fue más que un problema municipal, un corte de energía que nos afectó a nosotros”.

En cuanto a la reconstrucción de la ciudad en general, dijo que puede llevar un tiempo “porque no hay que descuidar otros servicios, como la recolección de residuos y otros trabajos. Pero hemos liberado toda a vía pública, e igualmente va llevar algún tiempo, porque son horas hombre, son camiones a utilizar y espero en pocos días más va a estar limpia la ciudad”. Enfatizó que en la prioridad “preocupa más llegar a la asistencia de los que sufrieron la voladura de techos”, a la vez que informó que fueron cuatro las familias evacuadas “y se alojaron en el Centro de Integración Comunitaria (CIC) del Paraná XIV. Algunas voladuras de techo impidieron que esas familias pernoctaran en sus casas”.