Estudiantes de Concordia analiza un nuevo cambio de foráneo

Por estas horas, la principal novedad en Estudiantes de Concordia pasa por la chance de un nuevo cambio de extranjero. Mientras Reynaldo García y Demetrius Treadwell vienen con una interesante producción, el bosnio Fahro Alihodzic no termina de encontrar su rol y el cuerpo técnico analiza variantes.

Alihodzic lleva ya varios partidos jugando poco y sin aportar demasiado desde lo estadístico, para un equipo que precisa del aporte de cada uno de sus extranjeros. A su vez, las ligas que están en etapa de playoffs, van dejando jugadores en el mercado tras ser eliminados y en ese escenario, son varios los conjuntos que prestan atención para un posible recambio.

Estudiantes es uno de ellos y uno de los apuntados es un viejo conocido de la Liga Nacional, como Rubén Garcés, con pasado en La Unión de Formosa y Atenas de Córdoba. El experimentado panameño viene de ser llamativamente cortado por Malvín, luego de que el equipo pasara los cuartos de final y alcanzara la etapa de semifinales. Allí, Garcés disputó 20 partidos por la LUB, con una media de 10 puntos y 8,8 rebotes.

Por otra parte, en el Verde esperan la recuperación de Facundo Giorgi, quien tuvo dificultades toda la semana por una inflamación en una de sus rodillas y no pudo jugar en Córdoba, ante Atenas. En principio la lesión no sería de gravedad y hasta podría haber tenido algunas chances de ver minutos en La Docta, según confirmó el kinesiólogo del equipo, Gerardo Ruso, aunque se eligió preservarlo.

La idea es volver a contar con Giorgi, pieza fundamental de este Estudiantes, para la seguidilla de juegos de local, que arranca este próximo martes ante Bahía Basket y continúa el otro lunes recibiendo a Peñarol de Mar del Plata, publica Básquet Plus.

Está claro que se trabajará en la recuperación física del alero y habrá que seguir su progreso, pero a esta altura, su presencia en dichos juegos es probable. Giorgi viene haciendo una muy buena temporada para los de Concordia, promediando 12,2 puntos y 7,4 rebotes, a lo largo de 39 partidos y 32,2 minutos por juego.

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