De ANALISIS DIGITAL
Corría el año 2012 cuando la multisectorial histórica de derechos humanos se dividió entre organizaciones oficialistas y opositoras. La relación de los organismos de derechos humanos con el gobierno de turno por la política de Estado en materia del juzgamiento a los genocidas y la situación de los derechos humanos en la actualidad, son dos de los puntos de desunión de las organizaciones.
Del lado de las organizaciones opositoras señalan como necesaria la autonomía de los organismos de derechos humanos en relación con el Estado por ser el propio aparato estatal el causante de los crimenes de lesa humanidad. A su vez, las organizaciones populares opositoras señalan que la pérdida de autonomía se refleja en la ausencia de críticas contundentes en relación a los distintos cercenamientos de los derechos humanos durante la década kirchnerista: inteligencia a organizaciones sociales, procesamiento de militantes opositores, la pobreza, la represión en movilizaciones y a los pueblos originarios, la continuidad del aparato represivo de Estado a través de la policía y los servicios de inteligencia, entre otros.
Por su parte, los organismos de derechos humanos tradicionales y las organizaciones afines al gobierno señalan un reconocimiento a la decisión política de Néstor Kirchner y la continuidad de Cristina Fernández en relación al juzgamiento de los genocidas durante su período gubernamental. Además, desde el espacio, se defienden conquistas como la Asignación Universal por Hijo, la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, la estatización de las AFJP, la recuperación de la mitad de YPF, entre otros avances.
En ese sentido, el espacio cercano al oficialismo se reunió por la mañana de este miércoles en la sede de CTA Entre Ríos (alineada a nivel nacional con Hugo Yasky y el Gobierno Nacional). A dicha reunión concurren los organismos de derechos humanos tradicionales en conjunto con organizaciones como las distintas variantes del Frente Para la Victoria, que van desde espacios tradicionales del PJ hasta sectores del Partido Comunista y Nuevo Encuentro.
A su vez, por la tarde de este martes, se reunieron en la sede de Agmer Paraná las organizaciones populares opositoras al gobierno para la organización de la columna que irá por detrás de la movilización, con una cuadra de distancia de la tradicional. Allí se juntaron militantes de Agmer Paraná, CTA michelista, el Frente de Unidad de Estudiantes en Lucha, la Corriente Clasista y Combativa. A su vez, expresiones partidarias como lo son la del Partido Socialista, la Nueva Izquierda, el Partido Comunista Revolucionario, entre otros. También se cuenta con la presencia por tercer año consecutivo de la Juventud Radical, de reciente protagonismo en el eufórico rechazo al acuerdo de su conducción partidaria con el macrismo.
La marcha
Para este martes, a 39 años del inicio del golpe cívico militar más sangriento del continente y uno de los mas nefastos del mundo, la movilización comenzará como es habitual frente al monumento a los desaparecidos en la plaza Saenz Peña. La movilización será encabezada por los organismos de derechos humanos, quienes contarán con el respaldo inmediato de las organizaciones afines al gobierno. Por su parte, las organizaciones opositoras, concentrarán en el mismo lugar, pero se ubicaran por detrás, en una columna a una cuadra de distancia. El horario será el habitual de las 19 horas y marcharán en conjunto hasta la intersección de calle Buenos Aires y Cervantes, donde la marcha oficial desembocará en la Plaza Alvear, mientras que las organizaciones opositoras finalizarán frente a la casa de Gobierno en reclamo por "los derechos humanos de ayer y de hoy".
Foto: Paraná Hacia el Mundo.