Tras renunciar a la Presidencia de la Cámara, Gemignani integrará la Sala III de Casación

El presidente de Casación es un cargo protocolar y administrativo, con funciones de superintendencia, pero no participa de ninguna Sala ni dicta sentencias durante el año que dura su mandato.

Gemignani fue denunciado por un escándalo ocurrido en julio de 2016, cuando ordenó detener a una prosecretaria de Casación. Por ese hecho, fue convocado a dar explicaciones por el Consejo de la Magistratura. No se presentó personalmente, se limitó a dar explicaciones a través de un escrito, y justificó su accionar en el hecho que creía que se estaba cometiendo “un ilícito”.

Aunque fue sobreseído penalmente, Gemignani está acusado de "falta de consideración y el respeto debido a otros magistrados, funcionarios y empleados judiciales", "actos ofensivos al decoro de la función judicial", "negligencia en el cumplimiento sus deberes, así como de las obligaciones establecidas en el Reglamento para la Justicia Nacional" y "violencia de género".

Según puso reconstruir Infobae, había habido una gestión el jueves pasado para que el camarista presente su renuncia antes del plenario del viernes, pero se habría negado. Finalmente lo hizo.

"Con el fin de contribuir al mejor funcionamiento de la Cámara de Casación penal he decidido declinar el cargo de Presidente, convencido que la trascendente misión jurisdiccional que se nos encomienda excede todo cargo, y exige continuar con el mayor estándar de apego a la Constitución y las leyes en la resolución de los casos que se nos somete a consideración", fue la declaración de Gemignani que dejaron trascender en su entorno.

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