Diego Maradona continuaba hoy internado en una clínica de esta capital con "pronóstico reservado", aunque su estado general presenta una evolución favorable respecto del que tenía cuando ingresó. Maradona seguía este lunes en terapia intensiva y presentaba una mejoría de su presión arterial y del funcionamiento cardíaco, aunque padece "un cuadro compatible con neumonía aspirativa", de acuerdo con el parte médico dado a conocer al mediodía.
El ex capitán se encuentra en "franca mejoría", señaló esta noche el doctor Alfredo Cahe, su médico personal, quien de todas formas, advirtió en declaraciones a la prensa que las horas críticas "todavía no pasaron".
"El respirador artificial no se lo quitaron por precaución y por el tratamiento, y continúa sedado", agregó Cahe al dejar la clínica Suizo Argentina. El ex futbolista debió ser internado de urgencia ayer por la tarde, a causa de una insuficiencia cardíaca y espiratoria. Según se informó oficialmente, el ex capitán de la selección nacional presentaba en el momento de su internación "una crisis hipertensiva en un cuadro basal de miocardiopatía dilatada y posterior hipertensión arterial, que necesitó edicación de apoyo hemodinámico".
También padecía una "una insuficiencia ventilatoria, que motivó entubación para asistencia respiratoria", a efecto de lo cual se encontraba sedado en forma ermanente. Sus hijas, Dalma y Giannina y su ex esposa Claudia, junto a sus padres y amigos más íntimos, fueron los primeros en llegar al sanatorio. Maradona había arribado procedente de una casaquinta situada en la localidad bonaerense de General Rodríguez, donde estaba hospedado.
Maradona habría sufrido la descompensación nerviosa mientras descansaba en la casa quinta, tras asistir al triunfo de Boca sobre Nueva Chicago. Este lunes al mediodía, el astro recibió un mensaje solidario del Presidente de la Nación, Néstor Kirchner, quien casualmente se reintegró a sus actividades normales después de haber pasado por una internación. "Un abrazo muy grande, espero que se recupere rápidamente. Me causa mucho dolor. Nos ha hecho llorar de alegría, ojalá que se ponga bien pronto", expresó el mandatario, quien asistió al acto realizado en una radioemisora local.
A lo largo de la mañana -durante la cual el médico Alfredo Cahe habló en varias oportunidades- el mandatario se mantuvo al tanto de la evolución del estado del astro a través de su vocero Miguel Núñez. Kirchner le encomendó a Núñez que se comunicara con la clínica o los familiares de Maradona, para seguir paso a paso la evolución del cuadro clínico del ex futbolista. A media mañana llegó a la clínica Claudia Villafañe, ex esposa de Maradona, y luego desfilaron otros allegados como Carlos Bilardo y el secretario de Deportes, Roberto Perfumo.
El ex jugador y Villafañe se hallaban distanciados, incluso con los trámites de divorcio iniciados, pero ante esta circunstancia Claudia está otra vez a su lado. Maradona volvió a convertirse en noticia de primera plana por un problema de salud, que hizo recordar aquella insuficiencia que sufrió en 2000 en la ciudad balnearia de Punta del Este, en Uruguay, donde su vida pendió de un hilo por culpa de una sobredosis de droga. El "paisaje" en inmediaciones de la clínica presenta a decenas de periodistas y numerosos seguidores de Maradona, quienes obligaron a cortar la mitad de la avenida Pueyrredón. Los últimos acudieron espontáneamente, muchos con pancartas en las que profesaban su amor por el ex capitán de la selección argentina. Inclusive, muchos automovilistas que pasaban por el lugar hacían sonar bocinas para dejar su marca.
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