
En septiembre de 2009, Guillermo Huarte denunció a los concejales Molla y Chada de haberle solicitado dinero a cambio de sus votos a la autorización para instalar un frigorífico en el predio de lo que será el Parque Industrial de la ciudad, a partir de un proyecto por el que se le cedían tierras fiscales municipales por un plazo de 20 años. “El Honorable Concejo Deliberante está constituido por gente que no es correcta, en una palabra, un poco burda y desagradable, coimeros”, había dicho el empresario a la prensa.
Sobre el edil Molla, Huarte había precisado: “Cuando estuvo en el frigorífico de Buenos Aires, en un punto de la reunión, cuando habíamos terminado de almorzar, me hizo saber que el grupo que estaba era el que trabajaba y que él era el político (…) Días después, me pide 15 mil pesos de coima para que el proyecto salga aprobado”.
“Que quede claro para todos, que lo que yo digo, lo asumo, y no me gusta mentir, me hago cargo de todo lo que digo, que presenten los juicios que quieran, yo sé lo que tengo que hacer”, sentenció Huarte en aquel momento.
Este viernes, según se confirmó a Recintonet, el juez Callejas imputó al edil.