Como el aire necesitaban los tres puntos, tanto Aldosivi como Defensa y Justicia. El de Mar del Plata llegaba con seis sin alegrías (cinco derrotas y una parda) y el sueño de alcanzar la Promoción comenzaba a quedar lejos.
Y con ganas de revertir la malaria lo planteó el local, que en lo primeros minutos fue un Tiburón que arrinconó a su rival. Y de tanto buscarlo, los dirigidos por Daniele se pusieron en ventaja gracias al gol de Mariano Martínez tras un rebote de Perafán.
A partir de ahí, la calma llegó a La Feliz y la impotencia pasó a controlar al Halcón, que manejaba la pelota pero no podía generarle peligro a una firme defensa. El Tiburón apostó a la contra y lastimó: primero Gigli estuvo a punto de convertir y luego Velázquez lo bajó a Briones en el área. Pena se encargó de marcar el penal y estampar el 2-0, que parecía definitorio.
El complemento se inició con un ritmo mucho más calmo. La visita trató de adelantarse para descontar, pero careció de ideas. Enfrente había un equipo conforme y cómodo con el marcador, que cuando se animó un poco rozó el tercer festejo de la noche.
Defensa y Kusticia fue a Mar del Plata en búsqueda de una victoria para engrosar el promedio y alejar los fantasmas del descenso, pero de la ciudad balnearia se llevó de recuerdo una derrota.
El Aldosivi del Gato Daniele, que está cerca de renovar su vínculo, demostró que no está muerto, que tiene siete vidas y aún conserva esperanzas de alcanzar la Promoción para subir.