El primer tiempo fue muy equilibrado, con una incansable lucha en la mitad y pocas luces cerca de los arcos. El Tatengue arrancó mejor, acorralando a su rival con una presión alta, pero antes del cuarto de hora, sin sufrir ninguna clara en el arco defendido por Rodríguez, los de De Felippe ya habían equilibrado el trámite.
La más clara de esa pobre etapa inicial fue del visitante. Gerlo se confió en la salida, perdió con Mancuello y luego se dio una sucesión de pases en el área sin que ningún jugador se animara a rematar pese a la posición favorable y entre Parra y Montenegro se perdieron increíblemente el primer gol.
En el complemento esa paridad se rompió. Unión adelantó sus líneas y generó varias situaciones propicias para tomar ventaja. Brahian Alemán se perdió un gol cantado a los ocho minutos, al pifiar el remate casi en el área chica, Bertocchi pateó apenas afuera entrando por el segundo palo.
Después Rodríguez despejó un centro de Vella que se metía y Laverni, a instancias del línea, anuló mal un gol por una inexistente posición adelantada de Palacios... en la última, a los 47’, Rodríguez, otra vez, le sacó el gol a Salinas con una gran atajada abajo contra el palo izquierdo.
Lo de Independiente, en cambio, fue tan pobre como preocupante. Sin ideas, sin pisar el área rival durante 50 minutos seguidos, el equipo de Avellaneda casi que reflotó su peor versión de las últimas fechas, pero con la salvedad -no menor- de que al menos hoy no perdió, señala TyC Sports.