En el primer tiempo los que más jugaron fueron los nervios. A los dos equipos les faltó fútbol, se los vio atados y retraídos. Ambos mostraron querer asegurarse demasiado en el traslado de la pelota para no cometer algún error.

Si bien los de Diego Cagna comenzaron siendo mejores porque fueron más incisivos, eso duró hasta que apareció Rolle en el partido. El delantero del equipo de Omar De Felippe probó los reflejos de Peratta y, el arquero respondió correctamente. La mejor llegada que tuvo Newell’s fue a través de Camacho con un cabezazo que salió cerquita del palo derecho de Tombolini. Muy poco para dos equipos que necesitan sumar puntos como el agua.

El tempranero gol de Santiago Vergini de penal a los tres minutos del segundo tiempo (penal de Tejera a Muñoz) le cambió la cara al partido porque Olimpo reaccionó, se adelantó en la cancha y fue a buscar el empate. Así, el partido se hizo de ida y vuelta.

Newell’s estiró la ventaja a los 14’ con Urruti. Parecía que el local liquidaba y se sacaba la mufa de encima. Pero Rolle apareció a los 17 minutos para descontar y, todo cambió. Olimpo fue el que tomó la lanza, acorraló a su rival y le empató un partido increíble con un gol de Lucero a los 42. Encima, Pavlovich se comió el del triunfo para los bahienses estando solo frente a Peratta, señala Olé.