Maulión alertó contra el virus de la corrupción y la injusticia

“Vemos que hay esperanzas, expectativas, ilusiones, proyectos y propuestas personales, comunitarias, familiares, sociales. Y queremos paz, queremos y necesitamos solidaridad, convivencia, convivencia saludable, justicia rápida, desarrollo constante. Y en este horizonte de expectativas, vemos también el virus de la discordia, la confrontación, la mentira, el resentimiento, la corrupción, el abuso, distintos modos de injusticia, de marginación, que golpean ese horizonte de expectativas que tenemos”. La advertencia la formuló ayer el arzobispo de Paraná, monseñor Mario Maulión, durante la homilía que pronunció durante la misa que presidió en la Catedral, y que fue previa a la procesión de Corpus Christi, que este año tuvo una inusual e importantísima presencia de fieles, un hecho que el prelado calificó como “saludable” para la vida de la Iglesia.

La conmemoración de Corpus Christi recuerda la institución de la Eucaristía, que Jesús realizó en la última cena, y tiene un origen antiquísimo: fue instaurada oficialmente por el Concilio de Trento, y según algunos historiadores, su nacimiento ocurrió en la ciudad belga de Lieja, en el siglo XIII.

Ayer, ante un templo colmado de fieles, Maulión recordó las palabras del Papa Juan Pablo II cuando, al ingresar el mundo al tercer milenio, planteó un desafío para la Iglesia Católica: ser “casa y escuela de comunión. Comunión, unión con Jesús, unión con los hermanos. Casa de comunión porque en ella tiene que habitar la comunión. Escuela de comunión porque en ella hay que aprender a vivir en comunión. Me pregunto, y los invito a que nos preguntemos como iglesia, ¿podemos decir que nos hemos propuesto realizar abnegadamente el desafío del Papa? En nuestra comunidad, ¿habita la comunión? En nuestra comunidad, en nuestra familia, escuela, en nuestras comunidades, en esta convivencia social, ¿aprendemos a vivir en comunión? ¿Es realmente la Iglesia casa y escuela de comunión?”, se preguntó, con insistencia.

En opinión de Maulión, “en nuestra cultura habita con frecuencia el desencuentro, la confrontación o la violencia. La fe ¿no nos exige dar el testimonio de la comunión? En nuestra cultura por momentos crece, y parece que a ritmo creciente, la violencia, y hay poderosos e influyentes modelos de enfrentamientos y de resentimiento. La fe ¿no nos exige que aprendamos a vivir todo lo contrario de esta cultura de violencia y muerte? No solamente no hay que aumentar la violencia, tampoco podemos cruzarnos de brazos, sino laboriosamente aprender el camino de la fraternidad y el servicio”.

En ese orden de ideas, planteó: “Cuando hablamos de comunión, ¿no hablamos también de vida? Ante una cultura de muerte, y ante una enseñanza de vida y de amor que prioriza lo emocional, lo pasajero, dejando de lado lo moral, y descuidando lo profundo de la vida y del amor, estamos llamados a enseñar a amar, a vivir, a promover la vida”.

Exactamente a las 16, se había iniciado la celebración que, en principio, estaba previsto que se realizara en el atrio de la Catedral, al aire libre, pero la inestabilidad climática obligó a cambiar de planes. De modo pues, que la misa de Corpus tuvo lugar en el interior del templo, donde los fieles se apretujaron como pudieron —algunos, incluso, no pudieron ingresar, y siguieron la celebración desde afuera—, y hubo dudas de la realización de la procesión hasta último momento. “La lluvia todavía no aparece, así que vamos a hacer nomás la procesión”, anunció el párroco de la Catedral, Silvio Fariña, al término de la misa, que se extendió hasta las 17.20.

La procesión, presidida por la cruz, acompañada por el Santísimo —la única vez en el año que sale al exterior— partió del templo, y se encaminó por calle Corrientes hasta La Paz; de allí siguió hasta Buenos Aires, con destino final en la Parroquia San Miguel, donde desde hace cuatro años existe un grupo de fieles en adoración permanente las 24 horas. La compacta fila consiguió llenar, completas, casi cinco cuadras.

“En este año eucarístico —había dicho un rato antes el arzobispo de Paraná— celebramos la fiesta del cuerpo y la sangre de Jesús, unidos también a la celebración que ya hizo hace unos días en Roma Benedicto XVI, y a todos los hermanos diseminados en todas partes del mundo. (...) Y como ellos también en esta oportunidad paseamos el corpus por nuestros solares, por nuestra vida, por el escenario de nuestra convivencia diaria, por nuestro corazón, nuestra comunidad, nuestra ciudad”.

NUESTRO NEWSLETTER

Deportes

Francisco Cerúndolo se impuso con gran reacción ante el Filip Misolic. (Foto: Clement Mahoudeau/FFT)

Banfield dejó en el camino a Independiente Rivadavia en la Copa Argentina

El "Taladro" se impuso 2 a 1 en Córdoba y sacó boleto a octavos de final.

Básquet: el entrerriano Joaquín Folmer representará a la Argentina en la AmeriCupU18

Joaquín Folmer, el crespense que será parte del certamen continental en Buenos Aires.

En la previa de la Copa América, Edinson Cavani renunció a la selección uruguaya

El delantero de Boca decidió dar un paso al costado, tras cuatro mundiales y cinco Copa América (fue campeón en 2011).

Amatti

Esteban Amatti, el ex boxeador que le da pelea a las adicciones.

River

River irá por un triunfo ante Deportiv Táchira para ser el mejor primero de la fase de grupos de la Copa Libertadores.

Dening

Al igual que en junio del 202, Emanuel Dening aparece otra vez en el radar de Patronato.

Paracao

En un partido pendiente de la APB, Recreativo falló en la última bola y Paracao festejó.

Diego Correa

Diego Correa será uno de los dos paranaenses en Los Pumitas en el Mundial M20 de Rugby.