Por Jorge Daneri (*)
Seguramente seres humanos -aún sosteniendo convicciones y compromiso abrazados a sus ideologías partidarias- afiliados de la Unión Cívica Radical y del Partido Justicialista, realizarán presentaciones ante los Tribunales de Ética (conducta) de sus partidos, para solicitar la investigación, ejercer, como decimos los ecologistas acompañando el pensamiento de Leonardo Boff, la ética del cuidado mutuo, frente a la decisión mayoritaria en el primer caso, como minoritaria en el segundo -Edgardo Kueider- acompañando el proyecto denominado Ley Bases...
No existe duda alguna que la palabra se encuentra amenazada. El rescate de la palabra es un requerimiento de una nueva conciencia ecológica, una alerta contra el embate de las fuerzas que impiden nuestro contacto con ese lenguaje del que surgen la crítica, el júbilo, la creatividad y el contacto más profundo con los otros y con nosotros mismos. (Ivonne Bordelois, 2003)
El lenguaje histórico que trasmiten las ideologías expuestas -más allá de pasados recientes de violaciones extremas con Carlos Menem y Fernando De la Rúa a partir de la claudicación que podríamos denominar Domingo Cavallo- se da de frente contra este muro denominado proyecto de Ley Bases...
La palabra "Régimen" es todo un símbolo para la UCR. “Es necesaria la gran reparación, la causa habrá de abatir al régimen falaz y descreído para, a través de las efectividades conducentes, concluir con las patéticas miserabilidades del pueblo”, afirma Hipólito Yrigoyen.
El 12 de octubre de 1916, una multitud llevando en andas a su caudillo, ingresa a la Casa Rosada. El “régimen falaz y descreído” ha sido abatido por el primer movimiento nacional de masas en la Argentina del siglo XX.
Este "Régimen", agravado hasta lo impensado, se expone y presenta hoy, en el proyecto Ley Bases y focalizada aún más en el denominado, precisamente, Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI).
Muchas organizaciones sociales y ecologistas han hecho llegar a cada legislador nacional, un conjunto de documentos que advierten, denuncian y reclaman un NO acompañamiento de este tipo genéticamente modificado de mega proyecto de vaciamiento de nuestros bienes naturales, sus diversidades biológicas y culturales, como también productivas.
Estamos frente a la legitimación de un saqueo organizado para una fiesta de muy pocas corporaciones de otros mundos, no los posibles, sino el vigente, concentrado, excluyente, de menos del uno por ciento de los ricos del Antropoceno (Capitaloceno). Están declarando la guerra a la madre tierra, cuando venimos solicitando la construcción de un Tratado de paz con la Naturaleza.
Lo que hacemos con nuestros pensamientos, sentimientos y palabras al mundo habitado, seguramente seguirá siendo inescrutable para nuestros limitados métodos científicos; pero lo que sí es constatable es que, al haber quedado prisioneros en un lenguaje intervenido por la voluntad de poder del capitalismo moderno, nos hemos hecho sordos al lenguaje de la tierra, enceguecidos ante la fealdad de la construcción-destructiva, insensibles ante el veneno que comemos en nuestros alimentos, y profundamente desempatizados al perder la capacidad biológica de sentir lo que otros sienten.(Omar Felipe Giraldo e Ingrid Toro. 2020).
Se debe dar un rescate urgente del valor y sentido de la palabra y de los sistemas de ideas que esculpen. ¿Su violación implica sanciones cuando las consecuencias serán cualitativa y cuantitativamente impensadas para los ecosistemas y todos sus seres?
¿Será que la ética del cuidado mutuo volverá a ser primavera desde, por lo menos, los Tribunales de Ética partidaria?
La expulsión de un Partido es una sanción necesaria para los que abandonan sus ideologías y niegan su historia. Es el inicio de un proceso de sanación necesario para que las juventudes políticas puedan seguir sosteniendo los sentidos de vida partidarios. De lo contrario la degradación que nos trajo hasta aquí, seguirá profundizándose. Háganse cargo.
El Papa Francisco nos convoca a una "conversión radical", de lo contario vamos hacia una catástrofe o colapso total. Es demasiado grave, vital lo que está sucediendo, los efectos de este delirio.
Una compañera entrañable nos enseñó: "si las leyes humanas violan las leyes de la naturaleza, entonces no hay razón para cumplirlas". (Ramiro Ávila Santamaria).
(*) Abogado ambientalista.