Casi todos ellos están presos hace ya más de un año o quizás un poco más. De alguna manera, son reclusos que en toda unidad penitenciaria son tratados de otra manera, como siempre sucede con ex policías, ex militares o ex carceleros. Es el código que siempre se impone. “Tenemos que cuidarlos, porque son como nosotros”, dicen algunos penitenciarios. Tienen más acceso a reclamos de atención por problemas de salud o determinados privilegios en comidas, distracción o comodidad. Pese a que están acusados de delitos de lesa humanidad, por hechos cometidos durante la última dictadura militar en la Argentina y específicamente en Entre Ríos, donde se desempeñaron. Pero cada uno tiene también una particularidad: cobran mensualmente la jubilación pertinente, por el rol que tuvieron en los lugares en que se desempeñaron en la provincia, ya sea en la Policía, reparticiones de Salud o el Servicio Penitenciario.

Muchas agrupaciones en Entre Ríos alarman sobre la multiplicación de los problemas ambientales que se están desencadenando. Alzan en silencio cuatro nuevas espadas de Damocles se titula el informe que alerta sobre la construcción de nuevos represamientos en distintos segmentos de los ríos Paraná y Uruguay. Hay estudiosos que advierte por posibles catástrofes dantescas que las autoridades nacionales y provinciales no estarían previniendo. ¿Exageran?

También, en el reportaje a Adrián Fuertes, el incansable dirigente que insiste con su aspiración a la Vicegobernación, opinó que en la bandada de intendentes que anunció Busti que iba a pasarse para su sector, quedó en sólo dos pajaritos. Criticó duramente al diputado Argain por zigzagueante y dejó traslucir como duda que por culpa del legislador no se puede recibir un terreno para construir la nueva facultad de Kinesiología. Justificó como parte de los usos y costumbres de la política los pases de un sector a otro, y admitió que el urribarrismo intenta evitar las internas.

Páginas más adelante, las estadísticas que develan el alarmante número de suicidios en Entre Ríos. En el 2010 hubo 189 muertes producidas de esta forma y en los pocos meses que lleva el 2011 ya son 69. A la ciudad de Paraná le corresponden 24 de esos últimos casos, siete a Colón y seis a Concordia. La mayoría son hombres de entre 22 y 50 años. También se ha notado un incremento en el número de suicidios cometidos por menores de 22. Pero nadie conoce las causas del aumento en estos números, sí se sabe que irremediablemente se dan aquí, en el país y en el mundo.

En la columna de análisis político de este jueves, Los liderazgos fugaces: el caso del vicepresidente de la Nación, Julio Cobos expresa lo efímero de los liderazgos no sostenidos por una construcción seria.

Rescate de los arroyos es otro de los artículos que da cuenta del trabajo de vecinos, ambientalistas y artistas que han emprendido desde hace poco más de un mes la casi titánica tarea de limpiar parte del cauce del arroyo La Santiagueña, uno de los tantos cauces que cruzan la ciudad.

En cultura, “Somos un fenómeno social” define el comisario mayor Roberto Román a la Banda de Música de la Policía de Entre Ríos, un patrimonio histórico cultural de la provincia. Asimismo, Gurises y trenes, un futuro se titula el artículo que relata el trabajo que alcanza casi una década de la ONG Impakto Juvenil. Una nota sobre el arte que invade la Plaza Sáenz peña los domingos a la tarde. Y, la agenda más completa.

En Deportes, “El fútbol tiene que ser una diversión”, aseguró Alberto Ríos, una de las glorias del fútbol paranaense. Además, una nota sobre los 63 años de la primera carrera de Turismo Carretera en la provincia y Fangio festejó en Entre Ríos. También, una reportaje a Juan Centurión, el joven reclutado por Racing de Avellaneda.

En otras páginas, Acidez de la actualidad y Off de record.