El ex diputado nacional Marcelo Casaretto (FdT-Entre Ríos) analizó las medidas que anunció el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, a dos días de asumir la Presidencia Javier Milei.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio Plaza), Casaretto sostuvo que “en los dos años anteriores discutimos con Javier Milei en el Congreso, él con su visión y yo con la mía, finalmente lo votaron los argentinos como Presidente de la Nación y está llevando adelante lo que todos sabíamos que iba a llevar adelante, un profundo plan de ajuste estructural, de corte clásico, liberal, con muchos puntos en común de lo que fueron los planes de Martínez de Hoz, de Cavallo, de Macri y que ahora se presentan profundizados”.

En ese sentido, opinó que “en definitiva, esto termina siendo un tremendo ajuste sobre el poder adquisitivo de trabajadores y jubilados, significa una concentración de los ingresos en pocas manos, y significa liberación de los precios, del dólar, baja de subsidios por lo tanto aumentarán las trifas de transporte, de energía eléctrica, de gas natural”.

Y advirtió: “A la situación del gobierno anterior que algunos estaban de acuerdo y muchos tenían críticas, les quiero decir que habrá más inflación, además habrá recesión económica y una caída en el nivel de vida de todos los trabajadores y jubilados, porque las medidas tienden a incentivar la inflación en distintos rubros de la economía”.

Consultado por las alternativas a las medidas anunciadas, explicitó que “la decisión central sería equilibrar el déficit fiscal. Uno sabe que hay ingresos y gastos, anoche el Ministerio de Economía publicó un cuadrito donde dice en qué va a recaudar más y en qué va a gastar menos, y ahí hay una definición política. Es sano avanzar hacia reducir o eliminar el déficit fiscal, pero a quién le cobran los impuestos? Nosotros bajamos el impuesto a las Ganancias y el IVA a los trabajadores, ¿eso está bien o está mal? A Milei le parecía bien en septiembre y en octubre cuando dio quórum, votó y habló en el recinto a favor de esa medida, y ahora como Presidente propone derogarlo. Dijo una cosa y hace otra en esta materia. Y quiere bajar el gasto, pero lo único que se le ocurre es publicar en ese cuadrito que va a eliminar la movilidad previsional. Dice que los jubilados ganan poco, lógicamente debieran ganar más, y ante la fórmula de ajuste previsional, el gobierno anterior fue complementando los ingresos con decretos por encima de la fórmula, pero ahora lo que plantean es eliminar el ajuste trimestral de las jubilaciones e ir a un sistema por decreto pero en el mismo cuadrito hablan que va a bajar casi un punto del PBI el poder adquisitivo de las jubilaciones. Avanzar a reducir el déficit tendría una razonabilidad pero pretender gravar a trabajadores y jubilados y recortar las prestaciones en esa materia, no coincido y hay un montón de otras alternativas”.

Asimismo, sostuvo que “la casta empresaria no paga nada del ajuste, que son todos los que lo bancaron a Milei y fueron los principales aportantes de su campaña, y uno se queda con YPF, el otro con energía, el otro con algún sector del gobierno, y eso es la casta permanente. Si lo que hablamos es de cargos políticos, reducen algunos Ministerios, algunos gastos desde el Congreso pero eso es muy poco relevante, e incluso en ese cuadrito que ellos presentan ni siquiera aparece como un ahorro significativo”.

En este marco, reflexionó que “mucha gente piensa que está subido en una rama del arbolito y que la motosierra va a cortar la otra rama y van a caer los otros, pero cuando los tipos dicen que van a eliminar la obra pública, significa poner en riesgo la fuente de trabajo de 250.000 argentinos que trabajan en obras públicas y a los que no están en ese sector no les importa, pero hay mucha otra gente que vende materiales y hay industrias vinculadas con eso”.

“A esto ya lo vivimos en otro momento de la Argentina, la recesión económica y la concentración de los ingresos. De hecho, un esquema como el que propone Milei no es cuestión de tenerle fe y qué medidas de las que toma nos toca o no nos toca. El esquema es el mismo que tenía Argentina a fin del Siglo XIX y principio del Siglo XX: un modelo agroexportador, concentrado y en ese momento los argentinos éramos dos o tres millones de habitantes, pero el mundo cambió, han pasado 130 años de eso y el mundo es complejo y ahora somos 46 millones”, analizó.

“Eliminan algunos Ministerios, hay cuatro o cinco ministros menos; congelan los niveles de presupuesto de todas las Universidades argentinas y que se lo vaya comiendo la inflación, no veo cual sería la luz al final del túnel o del camino. No veo ninguna luz, porque se está extendiendo una reprimarización de la economía, volviendo a un esquema de una Argentina para pocos, y lo que viene después son consecuencias en la vida cotidiana”, apuntó.

Consultado por la deuda en dólares que tienen la provincia y los municipios, dijo que “se va de 300 que estaba el dólar a 800; o sea que a la provincia y los municipios que tienen ingresos en pesos les va a resultar muy difícil afrontar esos vencimientos”. “El 80 o 90% de las obras públicas que hay en Entre Ríos son nacionales y si lo que se plantea es no licitar más, no firmar contratos, ralentizar las obras en ejecución, el impacto es inmediato sobre Entre Ríos; si se plantea la situación fiscal de la provincia, en el esquema del gobierno de (Gustavo) Bordet había acordado aumentos salariales que contemplen la inflación y un poquito más –creo que terminó más cinco por encima de la inflación- pero ahora se vienen aumentos de precios en todos los rubros, tanto por los bienes que exportamos como por los bienes que exportamos, y cómo va a afrontar el gobierno provincial entrante una pauta salarial de cierta razonabilidad en este contexto de caída de la recaudación y de contracción económica. Va a ser muy difícil”, concluyó.