Manifestantes repudiaron la Ley de Semillas en un Congreso de AAPRESID

Por Juan Cruz Butvilofsky,

De ANALISIS DIGITAL

Aunque se esperaba la presencia del ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, en el Congreso de AAPRESID, el funcionario macrista no asistió y evitó las manifestaciones en contra del posicionamiento del gobierno nacional ante la reforma que pretenden llevar adelante sobre la Ley de Semillas.

"Nuestra presencia permitió que tengan que invitarnos debatir dentro del Congreso, en vivo por dos radios diferentes que trasmitian dentro del congreso. El debate fue entre Vilma Ripoll y el funcionario Reulet y en una segunda instancia con el presidente de AAPRESID", explicó Nadia Burgos, integrante de una de las organizaciones que se manifestó en Rosario, la Red Ecosocialista.

El gobierno nacional pretende solucionar un conflicto de tiempo entre productores y la multinacional Monsanto (y otras empresas de menor envergadura del agronegocio) sancionando una ley que favorezca a la industria en detrimento de los pequeños y medianos productores. El punto clave es la reutilización de semillas, que Monsanto pretende cobrar un canon sobre dicho mecanismo de producción ancestral. Para las entidades gremiales de pequeños productores -como la Federación Agraria Argentina- y organizaciones socioambientales, los organismos vivos no pueden ser patentados. Para el gobierno de Mauricio Macri la solución es darle la razón a Monsanto.

"La interpelación a todos los concurrentes del congreso permitió instalar un debate sobre la ley modificación y percibir el descontento de los productores por el desconocimieto del proyecto que Cambiemos-Monsanto están por presentar", agregó la referente local de la organización políticoambiental.

El lobby de Monsanto ha permitido el sostenimiento de Lino Barañao al frente de la cartera de Ciencia y Tecnología, ministerio que impulsó que la Argentina se meta en el negocio de la clonación de semillas durante la era del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.

El Congreso se desarrolló en el marco de una semana complicada para la multinacional que anunció el cierre de su mega emprendimiento en Malvinas Argentinas, localidad cordobeza, donde la población resistió al avance del agronegocio y logró expulsar a Monsanto de dicha ciudad por su carácter de contaminante y contrario a la salud humana.

"Seguimos adelante, esto recién empieza y la ida de Monsanto de Malvinas es la demostración de que se puede y un estímulo para seguir construyendo presente y futuro ecosocialista", agregó Burgos.

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