El receso de julio concluye el próximo viernes 22. Desde el lunes 25 se retoma la actividad en las escuelas, y es en esa segunda mitad del año cuando el Consejo General de Educación (CGE) proyecta implementar en Entre Ríos la extensión de jornada en las escuelas primarias: llevar de 4 a 5 horas la permanencia en clase de alumnos y docentes.

Según las proyecciones oficiales, serán 184 instituciones educativas las que tendrán extensión de jornada, distribuidas en los 17 departamentos y con una matrícula de 29.845 estudiantes las que implementarán la propuesta presentada por el Ministerio de Educación de la Nación en abril y aprobada en el seno de la asamblea del Consejo Federal en Rosario.

En esta primera etapa del programa, el CGE incorporará 120 escuelas durante el ciclo lectivo 2022 y 64 en el primer semestre de 2023, con la posibilidad de adherir otras instituciones que aún no están contempladas. Será con maestras y maestros de grado para fortalecer los aprendizajes de saberes relacionados con Matemática, Lengua, Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, Educación Digital e Inglés, esta última materia a partir de 4º grado.

La Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), el principal sindicato del sector, ya ha puesto objeciones a esa iniciativa.

Se lo hizo saber en una audiencia que mantuvo el gremio con el titular del Consejo de Educación, Martín Müller.

Susana Cogno, vocal gremial del CGE, presente en el encuentro con Müller, sostiene: “Hicimos nuestros planteos, presentando las preocupaciones en relación a lo que implica la extensión en términos organizativos, de carga laboral y salarial, por lo tanto de condiciones Laborales. Es importante no apresurar el proceso, dar tiempo al debate de las instituciones y de las comunidades educativas, por eso planteamos que en la provincia las condiciones se debatan en el marco de la paritaria”.

Y agrega: “La Provincia define avanzar la semana próxima firmando el convenio que va a garantizar el financiamiento con el ministerio nacional. Pero hay muchos temas pendientes”.

En un documento que hizo público en junio último, el sindicato observó que desde el inicio de la pandemia por el Covid en marzo de 2020, “señalamos que el desafío para toda la sociedad era -y sigue siendo- la construcción de respuestas colectivas que, en lo particular del ámbito educativo, contengan el derecho social a la educación, las condiciones sociales de las familias, los presupuestos educativos y el reconocimiento efectivo del trabajo docente”.

El gremio entiende que la pandemia “reconfiguró” el trabajo de los docentes, con la implementación de la enseñanza virtual, que “profundizan el desafío de cómo la escuela dialoga y se vincula con nuevas formas de construcción del conocimiento que exceden los márgenes de las condiciones que la escuela asumió hasta este tiempo. Del mismo modo, se comprobó la importancia y centralidad que la presencia de las y los docentes constituyen en la escuela”.

Y destacó que las escuelas, “desde su autonomía institucional, se encuentran concretando experiencias de extensión de la jornada escolar, en algunos escasos fortaleciendo curricularmente la terminalidad en el nivel primario”. En ese marco, subrayó: “Sin embargo, revertir la profunda desigualdad que evidenció la pandemia no podrá llevarse adelante sin un Estado decidido en una inversión educativa que reconozca el trabajo docente en su dimensión salarial, laboral, en la impostergable creación de cargos docentes, en personal de limpieza y mantenimiento de las escuelas, en infraestructura edilicia, tecnológica y de conectividad, y de esa manera, garantizar una verdadera educación de calidad, inclusiva y popular”.

(Entre Ríos Ahora)