
Existen 155 tributos en todo el país.
Anabella Quiroga
Un informe de la consultora Ycon releva que casi la mitad de los costos de los créditos se explica por el impacto de los impuestos y las tasas municipales.El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) recopiló en su Vademécum tributario 2025 la existencia de hasta 155 tributos distintos en el país, tanto a nivel nacional, provincial y municipal. De ese conjunto, 85 tienen origen municipal, una cifra que exhibe la dimensión de la presión fiscal que ejercen los gobiernos locales.
Por otro lado, el Informe de Tasas Municipales elaborado por el Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina (UIA) reveló que, durante 2024, se crearon 6 nuevas tasas a nivel nacional. Este fenómeno se intensificó en la provincia de Buenos Aires, donde 13 de los 45 municipios relevados aumentaron las alícuotas respecto de 2022, mientras que solo un municipio decidió reducirlas.Entre los casos más notorios aparecen la contribución obligatoria por mantenimiento de la red de tránsito pesado que dispuso Avellaneda y la tasa sobre combustibles que comenzaron a utilizar distritos como Pilar, Merlo, José C. Paz, Moreno, Marcos Paz, Escobar y Hurlingham. Además, se sumaron la tasa por libreta sanitaria vinculada a actividades económicas en Berazategui y el derecho por transferencia de inmueble dentro de parques industriales, creado en Azul.
En medio del impacto de estos tributos varios bancos decidieron mudar sus sucursales a municipios que cobran tasas más bajas. Así lo hizo el Banco nación y el Santander y recientemente Mercado Libre, que cerró su oficina en Córdoba por la suba de impuestos.
De acuerdo con un informe del IERAL y la Fundación Mediterránea, la carga tributaria explica aproximadamente el 44% del costo total del préstamo. En términos concretos, si una persona paga una cuota mensual de un crédito personal que incluye US$ 1.000 en concepto de intereses, en realidad abona US$ 440 correspondientes a impuestos, mientras que los restantes US$ 560 representan la tasa de interés neta aplicada por la entidad financiera.
Entre los gravámenes más relevantes figuran el impuesto al cheque, impuestos a los ingresos brutos aplicados sobre operaciones de créditos, y el impuesto de sellos que grava transacciones con tarjetas y otros instrumentos. A esto se suman las tasas municipales por sucursales, cajeros automáticos y terminales de autoservicio.
A la vez, la encuesta que llevó adelante la UIA detalló que, dentro de los 45 municipios relevados en la provincia de Buenos Aires, 13 decidieron incrementar las alícuotas de sus tasas durante el período analizado. Otros 31 municipios mantuvieron los porcentajes vigentes y uno solo resolvió aplicar una reducción.
Según los datos recopilados, el porcentaje promedio que abonaban las empresas industriales era de 0,79% en 2022, mientras que en 2024 alcanzó el 0,85%.
A la vez, una encuesta reciente de KPMG Argentina reveló las dificultades que enfrentan las empresas ante el peso de la carga fiscal.
El estudio identificó que el tributo con mayor impacto negativo sobre las empresas es Ingresos Brutos (IIBB), señalado por el 54,37% de los consultados como el principal factor que encarece los precios de los productos y servicios. El segundo impuesto más distorsivo para las empresas es el Impuesto a las Ganancias, seguido por otras imposiciones como las tasas municipales, que completan el cuadro de presión fiscal.
El análisis también evidenció que 93% de los ejecutivos y especialistas considera que el esquema tributario actual no estimula la inversión.