
Siempre de acuerdo a lo denunciado por Rita Arcusin, dichas palabras fueron formuladas por el sacerdote en la misa vespertina del pasado domingo 25 de septiembre. Incluso la denunciante pidió tener en cuenta que “en la actualidad, la iglesia católica en virtud de sus normativas excluye el antisemitismo y cualquier otra forma de discriminación (étnica y cultural) de sus enseñanzas religiosas, éticas y morales”.
Considerando por último que “el sacerdote en su doble condición de religioso y pastor, ha incurrido en actitudes que contrarían el interés público y la tutela de los derechos humanos”, ya que con sus dichos habría faltado “al discriminar por razones raciales o culturales”, según detalló Diario Río Uruguay.
La situación habría sido recogida por el rabino de la sinagoga local, quien habría anticipado que trataría de reunirse con el obispo de la Diócesis, Armando Collazuol, para determinar que fue lo que dijo el sacerdote en su homilía.
Asimismo, Arcusin dijo tener testigos que participaban del acto religioso y que también escucharon al sacerdote referirse de esa manera a los judíos.
Foto: Diario Río Uruguay