Causa contra Rivas: finalizaron los alegatos con pedidos concretos de condena

Por N. M.
(Desde Gualeguaychú, especial para ANÁLISIS DIGITAL)

Esta causa se inició de oficio luego que el 27 de julio de 2017, la Revista ANÁLISIS publicó una investigación periodística realizada durante más de un año y medio por su director, Daniel Enz, que permitió romper con un “secreto a voces” que fue sostenido durante cuarenta años.

La Investigación Penal Preparatoria del legajo Nº J/454 “Rivas Gustavo/ promoción a la corrupción de un menor, promoción a la prostitución de un menor de 18 años de edad reiterada” fue iniciada por la fiscal Martina Cedrés.

El Ministerio Público Fiscal realizó este martes su alegato de clausura, donde solicitó una pena de 25 años y hasta tanto quede firme, pidió al Tribunal que Rivas quede bajo prisión domiciliaria con tobillera electrónica y bajo estrictas reglas de conductas que le prohíban tomar contacto en cualquier forma con las víctimas de este caso.

Por su parte, la abogada Estela Esnaola, quien alegó también ayer, solicitó para su defendido una pena de siete años de prisión.

Tanto Esnaola ayer como Vitale hoy, adhirieron en un todo a lo expresado por el Ministerio Público Fiscal.

Ahora, el Tribunal pasó a un cuarto intermedio donde deliberará hasta el miércoles 22 a las 10 (hora a confirmar), momento en que dará a conocer el adelanto de su veredicto en una audiencia que será con acceso a la prensa y al público en general y que será transmitida por el Canal de YouTube del Poder Judicial.

Y el 5 de junio se fijó como fecha para dar a conocer los fundamentos de la sentencia.

El Tribunal está integrado por los magistrados Alicia Vivian (quien condujo el debate) y los vocales Arturo Exequiel Dumón y Mauricio Derudi.

La causa

Luego que se conociera públicamente la investigación periodística de la Revista ANÁLISIS el 27 de julio de 2017, hubo un “antes” y un “después” en la comunidad de Gualeguaychú y en la sociedad entrerriana.

Ya nadie pudo desconocer lo que se calló durante casi cuatro décadas y las víctimas comenzaron –de manera valiente- a exponer ante la Justicia sus experiencias sexuales extremas cuando apenas tenían entre 14 y 15 años de edad, previo a ingesta de alcohol que les proveía el propio Rivas.

Junto a las denuncias de las víctimas, se escucharon el testimonio de casi un centenar de testigos y como pruebas contundentes se aportaron más de 200 fotografías, diapositiva, filmaciones en video y chats de claro contenido sexual que demostraron de manera indubitable cómo habían ocurrido los hechos a lo largo de tantos años.

Hay que dimensionar que las víctimas eran casi niños, adolescentes entre 14-15 años en su gran mayoría. Ellos vivieron agresiones sexuales que luego repercutieron más allá del hecho violento. Fueron agresiones que atentaron contra la libertad y la dignidad de las personas. Algunos, incluso siguen padeciendo trastornos que afectan su integridad individual, pero también afectan a su entorno familiar y social.

El juicio comenzó el 1° de abril y en esa primera audiencia dos hechos quedaron prescriptos, porque habían ocurrido antes que la Argentina adhiriera a los Tratados Internacionales de protección en esta materia.

Las audiencias continuaron los días 3, 4, 8, 9, 10, 15, 16, 17, 22, 23 y 24 de abril; y el viernes 3 de mayo se hizo una inspección ocular en dos domicilios del imputado: el de calle Mitre 7 donde reside y la casona familiar de calle Urquiza.

Con el alegato de clausura se cerró la etapa de producción de pruebas y la parte acusadora pidió una condena ejemplar de 25 años para Gustavo Rivas en la postura del Ministerio Público Fiscal; mientras que las dos querellas pidieron para cada uno de representados siete años (el caso de Esnaola) y siete años y medio (en el caso de Vitale).

Rivas fue un saqueador de espíritu: ha determinado a sus víctimas a un estado sexual corrupto mediante actos prematuros y de actividad sexual exacerbada, tan perversos como excesivos para cualquier menor de edad. Y si bien ya opera el repudio social frente a esta personalidad avasallante, falta la condena de la Justicia para que las víctimas tengan la total certeza de que no están solas frente a esta clase de depredación de la condición humana.

El miércoles 22 se conocerá el adelanto de veredicto, en un proceso histórico por la cantidad de víctimas y por la modalidad en cómo fueron cometidos los hechos, teniendo en cuenta que las víctimas tenían en esos momentos entre 14 y 15 años de edad.

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