Los pobres resultados obtenidos durante el verano, sumados al mal comienzo que tuvo el equipo en el campeonato local, habían dejado al entrenador en la cuerda floja. Ni siquiera los dos títulos ganados en el final del 2015 lograron fortalecer la figura del "Vasco", quien nunca logró convencer a hinchas y dirigentes con el estilo de juego que le imprimió al equipo.

Las victorias ante San Martín de San Juan y Newell's por el certamen doméstico lograron poner paños fríos a la situación y sostener a Arruabarrena en el cargo. Sin embargo, el traspié ante Racing volvió a desnudar los cuestionamientos hacia el DT.

"El Vasco" había asumido en Boca en agosto de 2014, tras la salida de Carlos Bianchi. Durante su labor al frente del equipo, debió atravesar las crisis que desataron las eliminaciones consecutivas a manos de River en la Copa Sudamericana 2014 y en la Libertadores 2015. La conquista del título en el torneo de Primera División y de la Copa Argentina no lograron asegurar la continuidad del entrenador.

De cara a los próximos compromisos del elenco "Xeneize", Rolando Schiavi se hará cargo del equipo como técnico interino. El candidato más firme a suceder a Arruabarruena en su cargo es Guillermo Barros Schelotto, quien viene de una fallida experiencia en el Palermo de Italia, donde no pudo asumir por no tener la habilitación para dirigir en Europa.

Boca afrontará dos partidos de gran importancia en los próximos días. El jueves volverá a recibir a Racing, aunque esta vez por Copa Libertadores, y el próximo domingo visitará a River en el Superclásico del torneo local.

Fuente: Infobae