Hace una década FopeaA nació a partir de la necesidad de identificar, definir y aplicar pautas éticas para el ejercicio profesional periodístico. A partir de un intenso debate interno, los socios de todo el país elaboraron en 2006 un Código de Ética
Esta idea es central en la filosofía del Foro. “Apostamos a la autorregulación de los periodistas, sin crear tribunales de ética. Esta decisión se basó en el criterio del maestro colombiano Javier Darío Restrepo, quien desde siempre pregonó que el respeto a los principios éticos no se puede imponer mediante la coerción, la intimidación o el miedo al castigo, sino a partir de la convicción profunda de lo que es o no es correcto”, apuntó en un comunicado enviado a ANALISIS DIGITAL.
En ese orden, expuso que “más allá de que este tema tiene una trascendencia por encima de la coyuntura, el planteo que realizó ayer la Presidenta Cristina Fernández, al pretender que se sancione una legislación al respecto, cae en los aspectos negativos mencionados antes”.
“Relacionar este tema con la libertad de prensa genera una confusión de campos, como si fuesen contradictorios. Puede haber un comportamiento ético profesional individual sin libertad de prensa, como se dieron ejemplos (que costaron vidas) en la última dictadura militar, y viceversa, simplemente porque se trata de temas distintos y no opuestos”, agregó.
Por otra parte, exhortó al gobierno a que cumpla y haga cumplir la Ley de Ética Pública, “en todo lo referido a la difusión de la información”, para que “el pueblo pueda controlar el abuso de los poderosos, ya sea desde el Estado o desde el sector privado”.
“Desde el comienzo de su mandato como Presidenta, se ha hecho más difícil acceder a la información, por lo menos, en las siguientes instituciones: Jefatura de Gabinete, la mayoría de los Ministerios, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), el Banco Central, el Banco Nación, la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC), la Casa de la Moneda y la Inspección General de Justicia (IGJ). También hubo un retroceso en la labor de la Subsecretaría de Reforma Institucional y Fortalecimiento de la Democracia”, detalló.
Y subrayó: “Si la información de las instituciones estuviera realmente disponible, mejoraría en forma notable tanto la gestión del gobierno como la capacidad de control del pueblo. Este es un caso de soberanía informativa: la información pertenece al pueblo. Por ello, se debe saldar la larga mora en sancionar normas de Acceso a la Información Pública para los tres poderes del estado y en sus distintas manifestaciones territoriales”.
“Así como creemos que es imprescindible que los medios de comunicación elaboren sus propios Códigos de Ética, también consideramos que para que el trabajo periodístico pueda tener un horizonte integral es necesario en el país una ley de regulación de la publicidad oficial, además de las tan mentadas conferencias de prensa de los funcionarios de los diversos estamentos del Estado, tal como lo viene proponiendo Fopea desde hace años”, completó.
Finalmente, indicó como indispensable que se sancione una ley que proteja la libertad de conciencia de los periodistas, como la presentada el año pasado por Fopea.