Un centro de rehabilitación de Paraná cerró de manera imprevista y 18 trabajadores fueron despedidos. Se trata de una institución que funcionaba en calle Cuchilla Grande de la capital provincial.

Al respecto, la delegada de la Asociación de Trabajadores de la Sanidad (ATSA), Mariela Ponce señaló que “fue un cierre fraudulento, agotamos todas las instancias en la Secretaría de Trabajo y los dueños no aparecen”.

Además, informó que en diversas negociaciones a los trabajadores les ofrecen “menos del 50% de lo que corresponde de indemnización. Los profesionales hacen esto con los trabajadores de salud que ponen todo su esfuerzo a diario”, aseveró.

En tanto, una enfermera profesional, detalló que hace más de 12 años que trabaja en la empresa y los despidos “fueron de la noche a la mañana. Llegamos a nuestro trabajo y no nos dejaban entrar, fue algo desesperante y no nos pagan”.

“Pedimos que nos paguen lo que nos corresponde, estuvimos trabajando toda una vida y siempre respondimos a la empresa. Somos familias con hijos, necesitamos alimentarlos y todo esto es una falta de respeto”, aseveró.

“Es un año de crisis y esperamos que se solucione de la mejor manera”, dijo otra damnificada.

Por su parte, otro trabajador despedido mencionó: “En el lugar hubo remodelaciones y mejoras, entonces nos llamó la atención una suspensión sin saber el motivo y luego los despidos. Nos ofrecen menos del 50% y estamos atravesando una situación desesperante, porque sabemos que no vamos a cobrar ni el sueldo ni la indemnización”.

Por su parte, una de las enfermeras contó que vivió una situación particular: “Hace 15 años que trabajaba ahí, y cuando fui a Anses para conocer mi situación descubrí que estaba todo mal, no tenía aportes de ese lugar y figuraba como jubilada”.

Fuente: El Once