En el comienzo de la semana, el juez federal de Reconquista, Aldo Alurralde ordenó múltiples allanamientos en el marco de una investigación por narcotráfico que vinculaba a las ciudades de Rosario, Santa Fe y San Javier.

Fueron un total de 18 allanamientos que incluyeron dos dependencias policiales y entre los 11 detenidos se encuentran tres oficiales de policía.

En diálogo con LT10, Alurralde explicó que “son hechos graves y demuestran la permeabilidad que existe en distintas instituciones, entre ellas la Justicia, porque incluso hay jueces involucrados en causa por narcotráfico”.

“El narcotráfico maneja sumas de dinero que compra voluntades. Esta investigación arranca hace un año y se da cuenta de la existencia de distintos búnkers de comercialización barrial en San Javier, cocaína, la cual era ofrecida no solo a los residentes, sino a los turistas que visitan la zona de la costa”, detalló el juez federal.

En este contexto, “usaban policías de la provincia de Santa Fe que utilizando este pase que les permite el uniforme en los controles policiales, aprovechaban para trasladar la droga desde Rosario y Santa Fe a la zona de la costa”.

Además, sostuvo que, de las escuchas telefónicas, se descubrió que advertían a los otros integrantes de la banda cuando había allanamientos en las inmediaciones de los “búnkers” de droga para que la mercadería fuera movida.

Sobre las condenas, en el caso de estos oficiales de policía, contarán con dos agravantes: que se trata de una organización de tres o más personas y la calidad de funcionario policial. Podrían ser condenados a una pena de seis a 25 años de prisión.