El titular de la Consultora Datos, Jorge Majluff, analizó el resultado de las elecciones en CABA y el impacto que podría tener en Entre Ríos.
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio Plaza 94.7), Majluff sostuvo que “el gran triunfador fue La Libertad Avanza, el gran perdedor fue el PRO y en el término medio el peronismo queda en un empate con sabor a derrota porque las expectativas le daban que podía llegar a ganar y eso no se dio. De todos modos, la marca PJ estaba devaluada antes de la elección y sigue así, y creo que se perdió la oportunidad de una oxigenación incipiente del espacio que está muy complicado a nivel nacional”.
Evaluó que “a nivel provincial, lo que puede llegar a repercutir es el tema de las alianzas, en cuanto estaba en disputa quién iba a tener o a las proporciones del poder negociador que va a estar sobre la mesa a la hora de tejer las alianzas de cara a la elección de octubre. En cuanto a ver si esas equivalencias de fuerzas iban a estar muy sobrecargadas en favor de La Libertad Avanza o más equilibradas en favor del PRO o Juntos por el Cambio, claramente están muy recostadas y con mucho peso en La Libertad Avanza, tanto sea por el resultado en sí como por las declaraciones posteriores de Milei y Adorni dando a entender que van por todo, y que ellos ponen las condiciones, ponen el color y ponen todo. Me parece que eso es lo más preponderante en cuanto a lo que se puede venir en el interior e incluso en Entre Ríos”.
En ese marco, consideró que lo ocurrido en Capital Federal “encorseta” al gobernador Rogelio Frigerio: “Creo que lo arrincona; no sólo a Frigerio sino a todos los gobernadores del espacio de Juntos por Cambio los pone en una situación de menor capacidad negociadora, de menor peso en cuanto a las decisiones del armado de la lista. Creo que estaba en disputa si tenía más peso la estructura que Juntos por el Cambio puede llegar a ofrecerle, apoyada en el radicalismo que en cada pueblo tiene sus dirigentes, o la marca La Libertad Avanza, y me parece que hoy quedó de manifiesto que esa marca tiene un peso preponderante y lo va a tener seguramente mucho más en la elección nacional en octubre. En tal sentido creo que lo encorseta y más claramente lo pone en una situación negociadora bastante desventajosa”.
Consultado por la influencia que puede tener en las perspectivas electorales la polémica por el IOSPER, aclaró que desde la consultora “no estamos preguntando en concreto sobre IOSPER porque nadie nos ha pedido que lo hagamos, pero sí percibo con claridad que es un tema que está claramente en la agenda, con mucho ruido, y aunque no puedo cuantificar cuánto puede llegar a afectar, la sensación es que ha afectado en las valoraciones del gobernador y algunos dirigentes. No sé cuánto, no sé cómo y no sé tampoco cuánto tiempo puede llegar a durar el daño que pudo haber sufrido, porque a la postre siempre lo que termina mandando son los resultados. Es decir, si termina saliendo la ley y de acá a seis u ocho meses, los cambios que se implementen son positivos estaremos hablando de otra cosa. En política, a veces el árbol tapa al bosque y el hoy parece que va a ser para siempre, y en realidad lo que se termina imponiendo después son las eficacias o los resultados de las medidas que se toman”.
Sobre el análisis de la baja concurrencia a votar, consideró que “es un tema tan relevante como decir que La Libertad Avanza se está imponiendo y que hay un desencanto y un descreimiento en el sistema. Yo considero y lo digo con estudio de los focus group, no con opinión, que la apatía y la sensación de que tu voto no cambia nada, es lo que más comprende a ese más de 40% que no va a votar. En Chaco votó apenas 52%, en Jujuy 62% y un poco más, pero andan en porcentajes que están siendo históricos de baja concurrencia. Hay algunos consultores que opinan que hay un sector de esa no asistencia que son gente que no está tan mal, que no necesitan cambiar y que por eso no van, pero yo creo que eso comprenderá a un sector muy minoritario y que la mayoría de la masa crítica de ese sector es gente que está totalmente desencantada con los partidos políticos y con el sistema en general”.
En tal sentido, apuntó que “uno de los sistemas democráticos más fuertes que hay en el mundo, que es Estados Unidos, tiene voto voluntario y los guarismos de participación andan también en el 50%. Es una mala noticia para uno que tiene valor republicano o democrático y quisiera que haya mayor participación y más representatividad, pero tampoco hay que magnificarlo en cuanto a problemas de representatividad o a problemas de legitimidad de quién gana, porque fue poca gente a votar. Llama la atención a la política, pero hay que ponerlo en su justo lugar”.
Y agregó que “a los desencantados, que son ese 40 y pico por ciento que no va a votar, hay que sumarle que también hay un rasgo bastante similar a la gente que votó a Milei, que en el 2023 fue mucha gente enojada con la política, o sea que, si se suman los votos libertarios y ese porcentaje de votos desencantados hay una proporción de la población muy importante que está cuestionando los pasos que ha venido transitando la política en estos últimos años”.
En este contexto, dijo que “hay mucha coincidencia” con el proceso que transitó Mauricio Macri en las legislativas de 2017. “Noto mucha coincidencia, pero aumentada en ambos aspectos, lo positivo y lo negativo. En aquel entonces la percepción de la situación económica no era buena, los números de Macri en 2017 no eran de una imagen positiva muy alta, pero el pensamiento reinante de esa época era que había que darle más tiempo a Macri porque en dos años no se puede arreglar el lío de tantos años de kirchnerismo. Ese era el pensamiento imperante. Ahora el pensamiento es bastante parecido, con más profundidad en cuanto a que la situación económica castiga más a la gente, pero a su vez también el enojo de la opinión pública para con la oposición, el peronismo o, en este caso, ya para el sector político tradicional, también es más profundo. Entonces termina como empatándose esa diferencia, tanto el enojo por el sector político como la situación económica, que, si bien estamos con una inflación controlada, a la mayoría de la gente no le alcanza y vive peor que hace ocho años”, analizó.
Como dato concreto, reveló que “si hoy se pregunta, desde que asumió Milei la situación familiar y económica mejoró o empeoró, y apenas el 18%, como máximo 20%, dice que mejoró; un 30 a 35% dice que empeoró, y el resto dice que está igual. Esto habla de que el apoyo a Milei tiene que ver más con una cuestión de futuro que de presente.
En cuanto a las consultas de opinión por nuevos referentes políticos, Majluff sostuvo que “la encuesta no es una herramienta válida o muy aplicable hoy por hoy para detectar estas cuestiones, porque esas apariciones son, en primera instancia, en el mundillo político. Para eso hay que observar cuáles son las declaraciones de las élites, de los dirigentes políticos, de los empresarios, de los periodistas, y en ese mundillo sí hay nombres que están sonando, pero que todavía no trasuntan a la opinión pública”.
Como ejemplo, mencionó a “Guillermo Michel, del peronismo, que a nivel de la opinión pública no tiene números de conocimiento importante, pero a nivel mediático, presencial, en las élites o en el Círculo Rojo, es uno de los nombres que se está moviendo de cara a la elección de octubre y se escucha fuerte en esos ámbitos, que es siempre el paso previo a presentarse ante la opinión pública”.
En tanto, en el oficialismo dijo que “no se perciben nombres, porque están en funciones” y a la hora de hablar de un posible sucesor de Frigerio dijo que “es muy temprano” para verlo. De todos modos, apuntó que “hay que construirlo, pero no como posible sucesor de Frigerio, sino como posible candidato a intendente de las localidades. Eso sí, sería muy valioso y siempre es recomendable hacerlo; poner un par de dirigentes a recorrer y a la exposición pública para que se vayan fogueando, como se dice en la jerga futbolística, o para que vaya siendo conocido por la gente, por los vecinos”.
Explicó que “pasando la legislativa, cuando se encara la recta final, en los focus group se pregunta individualmente por los posibles intendentes, y ahí surgen algunos nombres que después se los somete a una encuesta para ver cuánto miden; pero todavía no llegó esa instancia”.
Al respecto, también advirtió que “yo considero como poco posible que Frigerio no quiera ir por la reelección, y en ese caso como que obtura que emerja otro dirigente provincial. En el caso de que eso suceda, creo que los primeros que se van a notar y que además van a tener una ventaja por sobre los otros son los candidatos a intendente”.
Sobre la posible figura del intendente de Concordia, Francisco Azcué, como candidato a gobernador, indicó que “tiene un padrón electoral enorme, pero va a depender de su gestión, que tiene que terminar calificándose de una manera muy buena, sacar buen resultado en Concordia y para vender la gestión”.
En cuanto al peronismo, dijo que “tiene armas viables y caminos posibles para recorrer con figuras como Rosario Romero, José Lauritto, Michel o Adán Bahl, por distintos motivos. En el caso de Romero por ser intendenta de Paraná; en el caso de Bahl por haber dejado una buena imagen de su gestión; en el caso de Lauritto, por su trayectoria política y por su buena gestión en Uruguay; Michel por su potencialidad intelectual y capacidad de trabajo. Pero todos ellos tienen el contrapunto de que su paraguas político es una marca un poco devaluada y van a depender de que al oficialismo no le vaya muy bien y que suceda algo y logren construir una marca más potente o más potable para la opinión pública que en este momento no lo está haciendo”.
En cuanto a la posible reelección de Frigerio, Majluff sostuvo que “hay ciertas situaciones que se dan naturalmente en la política y la situación natural es que el intendente vaya por la reelección, que el gobernador, sí la tiene, vaya por la reelección y con dos gestiones que sean aprobadas, un gobernador tiene armas como para tener una proyección nacional. Con una sola me parece un poco más dificultoso y también me parece complicado ver una posibilidad en donde le vaya mal a Milei y la gente siga buscando un espacio de centroderecha. Es un escenario que puede darse, pero me parece muy poco probable que se dé”.
“Si fracasa Milei, no creo que la gente busque colores similares. Al menos la historia hasta ahora ha sido, si fracasa, cambiamos. Acá el argentino nunca va por la ruta, va por la banquina; va por la banquina de la derecha y cuando se enoja con la banquina de la derecha, pega el volantazo y va a la banquina de la izquierda, y la ruta que hay en el medio es pocas veces transitada. Y el que quiere ir por la ruta, por el medio, le pasa lo que le pasó a (Horacio Rodríguez) Larreta, más o menos”, concluyó.