La cantante sorprendió al contar el mal momento que está atravesando.

Radicada en  Europa junto a su novio, Militta Bora reveló que está viviendo una situación muy difícil desde al menos un año y medio atrás, cuando empezó a tener los primeros síntomas.

"Hoy estoy tratando de salvar mi vida, estoy con un equipo de liberación de la diócesis de Italia. Vamos a explicar esto, el tema de los exorcismos. La realidad es que esto existe, yo no tengo una posesión, las posesiones existen, hay distintas intervenciones demoníacas, algunas son la vejación demoníaca, la obsesión demoníaca, que son todos resultados de maleficios que se hacen con magia negra, donde se pactan con satán, con entidades, para causar daño a una persona, por ejemplo, acelerar su muerte, generar enfermedades, cortes de caminos, que la persona, no sé, que le vaya todo mal", comenzó a explicar la cantante en Puro Show.

"Yo soy miembro de una organización budista laica, todos lo saben, activa toda la vida feliz, con amigos, en música, nunca fui depresiva, así dramática, así lloraba por cualquier cosa, qué sé yo, pero siempre espiritual, y yo antes de irme a Holanda, yo que ya me sentía mal, era más allá de lo psicológico, porque hice mi vida normal, deportes todos los días, nunca consumí drogas, casi que ni tomé alcohol el año pasado, y todos los días corría, hacia la práctica, mi práctica budista, igual yo siempre creía en Dios", continuó Militta.

La cantante aseguró que siempre fue juzgada por sus novios. Salió con Daniel Osvaldo y con Chano Charpentier, entre otros: "Siempre me juzgaban por los novios que había tenido, como que era drogada y que era rockera, mala y esas cosas, porque en mis videoclips es verdad que mi estética es toda como sadomasoquista, de chica mala, de cosas así oscuras, rock and roll, pero bueno, la gente que me conoce saben que no era así. Y la realidad es que yo no tenía muchos enemigos".

"Pasé un infierno, yo ya sentía cosas horribles, muy siniestras, que jamás hubiese pensado, estaba tipo en un lugar paradisíaco de luna de miel y me sentía tan mal, este malestar físico, frío, ahorcamiento, no eran ataques de pánico, me sentía sobre todo fuera de la vida, es como si me hubiesen asesinado el alma, como si no estuviera yo", contó.

"No siento mi respiración, como si no fuera yo, como si no tuviera el poder de mi vida. Es desesperante, porque me la pasé rezando. Estaba tan desesperada, todo el día, todo el día, y no sentía que tenía el poder sobre mí y sobre mi alma, y sentía como si me asesinaron y me cortaron todos los caminos, y además no me daba cuenta, que no es que yo me sentía así, sino que alrededor, por ejemplo, no podía manejar, porque tenía la cabeza como si tuviera, como todo borroso, como si estuviera fuera de mí, no pude manejar, andar en bici, mi cuerpo como si no fuera yo, mi sensibilidad, la frescura que te sentís cuando te levantás, que es otro día, que te decís, que estoy en tal lugar", manifestó Militta Bora, muy preocupada por su bienestar.

Fuente: Noticias Argentinas.