
El martes los integrantes del Tribunal ya habían determinado que Bussi, si estuviera en condiciones de salud, participe del segundo juicio oral por violaciones a los derechos humanos desde la casa en que cumple prisión preventiva, por medio del sistema de teleconferencia.
La decisión había sido adoptada por los magistrados Jiménez Montilla y Gabriel Casas, con el fin de asegurar “la continuidad del juicio oral y la preservación de la salud del acusado”, que tiene 84 años y que padece problemas cardíacos, que obligaron a suspender el proceso en dos ocasiones.
Anoche, tras sufrir una nueva descompensación, el ex represor fue traslado otra vez a la clínica en la que permanece bajo observación hasta que Rando determine si puede seguir compareciendo desde mañana, publicó Télam.
En este segundo juicio oral, que se encuentra en la fase de la declaración de los testigos ofrecidos por las partes, se trata de esclarecer el destino corrido por 22 personas en el centro clandestino de detención que funcionó en la ex Jefatura de Policía durante la última dictadura militar.
En agosto de 2008, en el primer juicio oral, concretado por la desaparición del ex senador provincial justicialista Guillermo Vargas Aignasse, hecho ocurrido en 1976, Bussi y Luciano Benjamín Menéndez fueron condenados a prisión perpetua, sentencia que el viernes fue confirmada en su totalidad por la Sala IV de la Cámara Nacional de Casación Penal.