Por tercer año consecutivo se realizó la tercera edición de la Maratón del Puente Rosario-Victoria, un evento que logró lo que nadie puede en el resto del año, permitir que casi 5.000 personas corran sobre el imponente viaducto que cruza el río Paraná.
Desde muy temprano la gente se comenzó a reunir en la rotonda ubicada en Pintor Musto y Costanera, donde se encontraba el escenario principal, para iniciar la entrada en calor correspondiente. De a poco, todos fueron caminando hasta la intersección del Puente y Boulevard Rondeau, lugar estipulado para la largada, la cual se dio apenas pasadas las 8.30.
Tal como ocurrió el año pasado, el gran monstruo de cemento se pintó de colores fluorescentes, con las remeras de la carrera, dando un paisaje realmente imperdible. En esta edición, las distancias estuvieron divididas en dos, con 11 kilómetros como modalidad integrativa, y 21 kilómetros para la competitiva.
Así fue que pasadas las 9 arribó el ganador de la distancia más chica, el paranaese Elias Uner, quien con un tiempo de 38’ 28’’ se adjudicó la prueba. El podio masculino lo completaron Gerónimo Bordón, en segundo lugar, y Joel Aguilera, en el tercero. En tanto, entre las damas quien se quedó con la distancia más corta fue Ana Paula Aguirre, seguida por Romina Scarabelli y Natalia Castelli.
Sin embargo lo mejor estaba por venir, la vedette de este año fue la nueva modalidad de 21 kilómetros, la cual quedó en poder de Marcos Delforno, con un tiempo de una hora, 11 minutos y 19 segundos. Detrás de él llegaron Sergio Hoffman y Víctor López, quienes completaron el podio.
A su vez, la más rápida de la rama femenina fue Fabiana Gaitán con una marca de 1 hora 27 minutos y 17 segundos, el segundo puesto quedó en manos de Marcela Balbi, mientras que el tercer lugar fue para Paula Villalba.
Cuando la gran mayoría de los competidores habían atravesado la meta, llegó el turno de la premiación, la cual tuvo como participantes estelares a la intendente de Rosario, Dr. Mónica Fein, el presidente Municipal de Victoria, Rubén Darío Garzilazo, el secretario de Desarrollo Deportivo de la Provincia de Santa Fe, Pablo Catán, quien se animó a la prueba de 11 kilómetros.
Finalizada la entrega de medallas y copas, llegó el tiempo del baile, los sorteos y la diversión, la gran mayoría de los que participaron de la competencia, junto a su familia, se quedaron disfrutando de una verdadera fiesta, la cual desde hace tres años se ha instalado como el principal evento social y deportivo de la ciudad de Rosario, ahora, de forma mancomunada con la ciudad de Victoria.
