Ayer a la mañana la Policía llegó al lugar luego de que un llamado anónima alertara a la comisaría cuarta que un hombre intentaba ingresar sin autorización a la propiedad. Personal policial llegó al lugar cerca de las 9.00 y tras mirar la vivienda se observó desde el exterior que había una ventana abierta. Los policías miraron hacia adentro y vieron algo extraño en las habitaciones. Tras confirmar las sospechas se encontró un vivero de plantas de marihuana.
Con este elemento se solicitó el allanamiento a la Justicia provincial y tras establecerse la existencia de las macetas con canabis sativa, se informó del suceso a la Justicia federal, que dispuso la intervención de la Dirección de Toxicología.
Tras varias horas de procedimientos se ordenó el secuestro de 66 macetas con plantas marihuana de hasta dos metros de altura.
Las plantas “se encontraban en distintas dependencias del domicilio, bien mantenidas, ventiladas artificialmente y con luz natural”, agregó el funcionario.
En la propiedad encontraron dentro de las habitaciones cerca de 10 pavos. Desde la Policía se informó que la materia fecal de las aves es utilizada como abono en las macetas para fertilizar y potenciar el crecimiento de las plantas.
Además, entre la tierra había poliestireno expandido y otros elementos para incentivar el desarrollo de la marihuana.
Sobre los dueños de la casa, se informó que son dos profesionales de la ciudad: un odontólogo de 51 años y su esposa, una psicóloga de 54. Los dos atendían desde hace años en la esquina en un conocido centro de salud privado especializado en niños y familia. Las autoridades policiales explicaron que se está frente a la violación de la Ley Nº 23.737 que reprime la producción y venta de estupefacientes.
Se alertó que es poco común que una persona pueda llegar a decir que era para consumo personal. En el lugar había cerca de 70 plantines, lo que revela que no es un número menor.
Se presume que por el nivel de desarrollo de las plantas, las mismas podían producir semillas y por lo visualizado tenían los mecanismos para secado. Además, en las habitaciones donde se encontraban las plantas, había varios veladores con lámparas potentes; ventiladores y acondicionadores de aire para mejorar el desarrollo de las plantas.
Tras el operativo se ordenó identificar a los profesionales, que quedaron a disposición de la Justicia, publicó El Once.
(Imagen: www.mundonews.com.ar)