Justamente, la nueva ley plantea lo contrario: la paulatina desmanicomialización, y en su artículo 27º fija taxativamente: “Queda prohibida por la presente ley la creación de nuevos manicomios, neuropsiquiátricos o instituciones de internación monovalentes, públicos o privados. En el caso de los ya existentes, se deben adaptar a los objetivos y principios expuestos, hasta sus sustitución definitiva por los dispositivos alternativos”.
Esa unidad, que se construyó contigua a la Colonia Psiquiátrica Raúl Camino, en Federal, tiene dispositivos de alta tecnología: alarmas contra incendio, control de internos por sistema de video, y tres cercos perimetrales. Su emplazamiento fue consecuencia de reclamos constantes de empleados de los hospitales psiquiátricos, que pedían una solución para los pacientes considerados peligrosos, con causas en la Justicia.
El Superior Tribunal de Justicia (STJ) se hizo eco del planteo, y en un acuerdo polémico, en 2007, dijo que la resolución de ese punto “no es resorte de solución del Poder Judicial; es el propio Poder Ejecutivo el que debe arbitrar los medios materiales y humanos adecuados para tratar y resolver el problema en discusión”. Y pidió “una urgente solución a los problemas planteados”.
La Justicia había observado el artículo 21º de la Ley Nº 8.806, que establece que si el sistema de puertas abiertas no da respuesta a la necesidad de internación de personas con padecimiento mental que sean consideradas de alta peligrosidad individual y social, el Poder Ejecutivo Provincial debe crear un servicio de seguridad psiquiátrico en Paraná. Esa unidad para pacientes “de alta peligrosidad” se comenzó a delinear en la provincia en 2004, y seis años después, se concretó, aunque no en la capital, sino en Federal, 200 kilómetros al norte.
El director de Salud Mental, Oscar Grilli, dijo que se trata de una obra “heredada” de la administración del ex gobernador Jorge Busti, que en 2005 firmó el decreto por el cual se ordenó la creación de un instituto psiquiátrico para varones condenados.
“Esto, así, es violatorio de los pactos internacionales. Hay que entender que la salud mental es una estructura más dentro de la salud. En su momento, nos opusimos fuertemente a la creación de esta estructura. Pero cuando llegamos ya estaba construido. Pero ahora logramos convencer a todos los funcionarios de la no conveniencia de contar con esa unidad, porque violamos pactos internacionales y la nueva Ley de Salud Mental”, contó Grilli.
Características
Ya no será un centro para alojar pacientes psiquiátricos con causas penales, será entonces la Unidad Penal Nº 8, y dependerá del Servicio Penitenciario de Entre Ríos. Se levanta a un costado de la Colonia Psiquiátrica Raúl Camino, a 5 kilómetros del casco céntrico de Federal.
Es una obra monumental: tiene tres cercos perimetrales, celdas individuales, cámaras de seguridad y un patio interno totalmente enrejado y capacidad para alojar a 28 personas.
Horacio Pascual, titular del Servicio Penitenciario, confirmó a El Diario que el destino que tendrá será para “como unidad penal de máxima seguridad para alojar internos que necesitan una contención especial”. De todos modos, aún no ha sido habilitada, aunque ya tiene ocupantes: tres internos “inimputables” que están al cuidado de los penitenciarios por una cuestión “de comodidad” ya que no pueden ser contenidos por el personal del hospital psiquiátrico.
(Foto: El Diario)