Pedro Ayala había vendido tres lotes la semana pasada en Pueblo Belgrano y decidió guardar por una semana el dinero en su casa y lunes depositarlo en el banco, pero le robaron mientras él se encontraba en el Centro de Jubilados Nueva Esperanza. Cuando Ayala llegó a su casa, ubicada en Veronesi y Pedro Ayala (ex Rocamora), se le cambió el nombre en honor a su padre, que fue el primer habitante de la zona y que ayudó a la construcción de la escuela, encontró que las luces estaban prendidas y la puerta de ingreso descalzada.
Cuando ingresó al domicilio observó que el placard de su pieza estaba revuelto y que se habían llevado el control remoto de un DVD que su ex pareja le reclamaba desde hace dos meses, cuando abandonó la residencia.
Sabiendo de la existencia del dinero, Ayala fue hasta el siguiente cuarto y percibió que se habían llevado la caja fuerte que guardaba – sin amurar- debajo de la cama, que tenía un peso de unos 50 kilos. En esa caja fuerte había una suma que rondaba los 450 mil pesos, producto de la venta de unos lotes que tenía en la zona, que había realizado la semana pasada, un reloj pulsera con detalles en oro, alianzas de matrimonio y dos aros de oro.
Conocido el hecho, tres móviles de la Policía llegaron a la escena y comenzaron las investigaciones, bajo la orden de la fiscal Martina Cedrés. Fue el dato de la faltante de un control remoto lo que despertó la curiosidad de los investigadores, el cual había sido solicitado con anterioridad por la ex pareja de Ayala.
Ayer por la tarde, y luego del visto bueno del juez de Garantías, la Policía realizó cinco allanamientos en domicilios del entorno familiar de Pedro Ayala, entre ellas la de la ex pareja. Uno de los procedimientos se realizó en el barrio Molinari, donde se secuestró algo de dinero y celulares, otro en calle Güemes casi España, donde se incautó poco más de mil pesos y celulares, otro en calle San Lorenzo casi Concordia, otro en Montevideo y Avenida Parque, y el último en Borques y Doello Jurado. Aunque no trascendieron precisiones sobre lo localizado en cada uno de ellos, se supo que se recuperó el control remoto requerido insistentemente por su ex pareja.
Un dato que será fundamental para esta investigación será la pericia que realizará la Policía Científica en Paraná sobre los celulares secuestrados, donde se realizará el entrecruzamiento de mensajes de texto y llamadas. En caso de que este examen arroje datos importantes y esclarecedores, podrían desprenderse otras actuaciones, publicó El Día.