Tras casi tres horas de reunión a puertas cerradas en el segundo piso del Senado, el bloque de senadores del Partido Justicialista, acéfalo tras la partida de Miguel Pichetto, resolvió delegar la conducción en el cordobés Carlos Caserio, quien aseguró que a pesar de la “diversidad” que habita en la bancada, “el grueso” de sus integrantes apoyará la fórmula Alberto Fernández-Cristina Kirchner.

Caserio fue electo por sus pares por unanimidad, y como vicepresidentes del bloque continuarán el formoseño José Mayans y el entrerriano Pedro Guastavino, además de su comprovinciana Sigrid Kunath, quien se sumó este martes a la “mesa chica”.

En la reunión hubo 17 de los 21 integrantes del interbloque: el catamarqueño Dalmacio Mera y el chaqueño Eduardo Aguilar fueron ausentes con aviso, y las dos faltas restantes fueron las del correntino Carlos “Camau” Espínola y el riojano Carlos Menem, quienes acompañarían a Pichetto en la conformación de un nuevo bloque.