Las últimas novedades surgidas en torno a la potencial reanudación del Torneo Federal A y la casi segura determinación de Juventud Unida de ser parte del torneo, empezó a mover un aquietado ambiente futbolero en la ciudad, afectado notoriamente por el largo parate que trajo acarreado la pandemia. Días atrás volvieron a entrenar los jugadores del Decano que mantienen vínculo con la institución y de a poco comenzaron a moverse algunas piezas para definir el nombre del entrenador.

Como pocas veces ocurrió, hay un consenso absoluto en que el elegido sea Norberto Raúl Acosta, el salteño que llevó a Juventud Unida a los dos logros máximos que ha tenido la institución, como son los ascensos del Argentino B al por entonces Argentino A y luego la hazaña de ascender a la B Nacional, además de un par de campañas realmente aceptables en la segunda categoría del fútbol nacional.

El presidente de Juventud Unida, Lucio Benítez, dijo la semana anterior en Radio Cero que “Beto (por Acosta) es un pedazo grande de Juventud, todos queremos que sea el entrenador y vamos a conversar para que se pueda llegar a buen puerto”.

De acuerdo a informaciones surgidas de la propia directiva del Decano, ya habría habido al menos una charla informal entre Benítez y Acosta, aunque todavía restan definir cuestiones importantes para poder confirmar el retorno del ex lateral izquierdo al banco de Juventud.

Por su parte, Beto Acosta ha optado por el silencio en estos últimos días, aunque anteriormente dejó en claro sus ganas de poder tener una segunda oportunidad en el equipo del sur entrerriano. “Juventud es mi casa, así lo veo. Pasamos cosas muy importantes, conseguimos logros que para muchos fueron impensados, trabajamos muy bien y cuando tuvimos que separar los caminos, quedó el afecto, el respeto y el cariño por la gente”, había indicado en una entrevista realizada por Radio Cero.

Está más que claro que la conjunción es sencilla en este caso. Juventud Unida quiere volver a contar con Norberto Acosta como entrenador y el DT salteño prioriza a Juventud en sus preferencias por un par de cuestiones. Primero lo afectivo y las ganas detener una segunda chance al frente del Decano, además de permanecer en Gualeguaychú donde está afincado junto a su familia, señala El Día.