El miércoles de la semana pasada, el juez de La Plata Luis Arias había emitido un fallo con una expresa "prohibición de alterar, modificar, eliminar o suprimir las funciones y la existencia" de la Afsca que conduce el kirchnerista Martín Sabbatella. Sin embargo, fuentes del gobierno nacional habían ya hecho saber que no cumplirían con el fallo por considerar que no tiene vigencia sobre un decreto presidencial.

Ese mismo día, pero unas pocas horas antes, el jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, había comunicado la decisión de fusionar la Afsca y la Aftic en la nueva Enacom, además del la creación de una comisión bicameral en el Congreso "para discutir una nueva ley de comunicaciones que integre las dos leyes, para que haya un marco normativo del siglo XXI".

Para evitar irregularidades como las que fueron denunciadas durante la gestión de Sabbatella, el DNU establece que el nuevo ente "será objeto de control por la Sindicatura General de la Nación y la Auditoría General de la Nación".

El texto establece además que es una "obligación permanente e inexcusable del Directorio dar a sus actos publicidad y transparencia en materia de recursos, gastos, nombramientos de personal y contrataciones". Sabbatella aún debe responder a la Justicia por el descuento impuesto a numerosos empleados de la Afsca para financiar a su partido Nuevo Encuentro.

El directorio del Enacom estará integrado por un presidente, tres directores nombrados por el Poder Ejecutivo y otros tres directores que saldrán del Congreso: uno corresponderá a la mayoría, otro a la primera minoría y el último a la segunda minoría. Todos durarán en su cargo cuatro años y podrán ser reelegidos por un solo período, publicó Infobae.