“Veníamos haciendo un excelente trabajo, teníamos todo controlado y el auto marchaba muy bien, pero se rompió la suspensión en una parte crítica del circuito”, comentó el piloto nacido en la ciudad de Paraná.
Es que el entrerriano estaba manejando en la madrugada cuando el prototipo se despistó provocando el abandono. “Pasó lo mismo que en el autódromo de Spa Francorchamps cuando se rompió la suspensión, y tuvo la mala fortuna que venía manejando yo”, aclaró Russo.
Además admitió: “Estoy bastante amargado porque veníamos con todas las intenciones de ganar esta carrera porque estaba todo dado para lograrlo, pero son cosas que pasan. Justo sucede en una carrera que veníamos preparándonos todo el año”.
Y cerró: “Es la carrera más dura del mundo y nosotros estuvimos. Vinimos a dar lo mejor, no se pudo y ahora vamos a pensar en lo viene”, expresó el paranaense en declaraciones a Carburando Radio.
La victoria finalmente fue para el Audi R18 T del equipo Audi Sport Team Joest formado por Marcel Fässler, André Lotterer y Benoit Treluyer. Detrás, a menos de 14 segundos arribó el Peugeot 908 del Team Peugeot Total que conducen Sébastien Bourdais, Simon Pagenaud y Pedro Lamy.