El director de Terapia Intensiva del Hospital San Martín de Paraná, Guillermo Grieve, manifestó su preocupación por el incremento de las atenciones por accidentes de tránsito ante el retorno de la normalidad de actividades.

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Grieve confirmó que “antes de la pandemia había bajado la accidentología, en 2007 había más de 160 a 180 chicos accidentados –la mayoría, 80% de motos- de los cuales más de 60 morían por año y más de 80 quedaban lesionados, algunos paralíticos y con lesiones graves que necesitaban rehabilitación y por ello se comenzó una campaña que pudo lograr que el uso de casco aumentara hasta llegar al 85 o 90% pasando a ser una de las ciudades con menos accidentología vial y se llegó a 2017 con apenas 50 accidentes graves con internados en terapia intensiva y menos de 10 muertes por año”.

“Esto fue extraordinario porque fue salvar de la muerte a más de 50 chicos por año y de lesiones a más de 100 chicos por año, y entre 2017 y 2019 la cosa estuvo estable con una accidentología baja en la cual se internaba a no más de tres o cuatro pacientes por mes. Luego la pandemia hizo que la gente no se movilizara y por eso la accidentología en el último año y medio fue muy baja”, valoró el galeno.

No obstante ello, lamentó que “cuando la gente se comenzó a transportar y ahí empieza a haber más transporte de una forma no controlada” y planteó que “olvidamos que en este momento el transporte que la gente hace obliga a un mayor control que no se ha hecho”. “Esto hizo que la semana anterior tuviéramos el 50% de la unidad ocupada, 16 pacientes con respirador, de los cuales ocho eran accidentes graves, muchos de autos”, puntualizó.

Especificó asimismo que “se había equilibrado la cantidad de accidentes de autos y motos, que antes era predominantemente de motos y creo que la parte de educación es importante pero la parte del control lo es más. Ahora es un Boca-River, ahora hay que controlar más que antes  y eso no se ve”. “Cuando la gente está en la calle y no es tan prudente, hay que controlar más. Ahí está el punto, hay que comenzar a controlar como se hacía años anteriores, sabiendo que cuando la gente comienza a hacer cosas quizás no es todo lo prudente que debiera ser”, remarcó. 

Afirmó en este sentido que “se está haciendo un screening que se había dejado de hacer por la pandemia, que va desde septiembre hasta diciembre, para ver qué pasó con el uso de casco y las medidas de prevención: no tomar alcohol, no ir más de dos, no ir con chicos menores de 12 años, embarazadas”.

Además, dijo que la incidencia del alcohol en los accidentes ocurridos en las últimas semanas en Paraná “es del 50%”. “El casco de la persona que maneja un auto es el cinturón de seguridad, muchas de las lesiones que hemos tenido iban sin cinturón y fueron despedidos. Las mayores lesiones que tenemos es cuando se despide a la persona fuera del auto, chicos que tienen lesiones cervicales y quedaron cuadriparéticos o cuadripléjicos. Obviamente además la velocidad, el uso de alcohol y la falta de prevención son fundamentales”, refirió el médico.

En ese marco, sostuvo que “esto se soluciona con control. La educación es muy importante pero el control también lo es, y si no van de la mano lógicamente se produce lo que estamos viendo”.     

Consultado por el contacto con autoridades para tratar la problemática, Grieve aseveró: “No he recibido ningún llamado, pero tampoco es necesario que se haga siempre y cuando se tomen medidas”. “El control en las ciudades tiene que volver a ser como antes, y quizás más que antes, al menos en el periodo inicial porque cuando la gente vuelve a hacer algo deja de lado ciertas medidas. Por eso el control es fundamental porque el 90% de los accidentes se podría haber evitado”, sentenció.

“Esto comenzó a despertarse en agosto, y se mantuvo en septiembre y octubre –los últimos tres meses-y lo que llamó la atención es que hubo muchos accidentes en la ciudad. No hubo tantos accidentes de motos como de autos, pero el control debe realizarse en la ruta y en la ciudad”, aseveró.

Covid-19

En otro orden de temas, Grieve confirmó que “en este momento no hay pacientes internados” por Covid en el hospital San Martín pero advirtió: “Hay un alerta que quiero transmitir a la sociedad. El ciclo de la cepa Delta llegó en la primer semana de septiembre al país y es de tres meses, por lo tanto hasta la primer quincena de diciembre tenemos que ser muy cautelosos con las medidas preventivas”.

“Debemos mantener las medidas hasta ese periodo porque el Delta es seis veces más transmisible y tres veces más invasor y por lo tanto todavía no sabemos  si este aumento de casos –hemos tenido aumento de hisopados y aumento de positivos- se va a trasladar a un aumento de pacientes internados moderados y graves y eso lo vamos a ver de acá a fin de año. Por lo tanto hay que mantener las medidas de cuidado”, especificó.

Reiteró que “hubo aumento de hisopados y aumento de positivos pero felizmente todavía eso no se trasladó a número de enfermos internados” y puntualizó que “en septiembre la cepa Delta era de entre 8 y 12% de los casos, en octubre pasó al 50-55% y ahora estamos en el 83-84% de cepa Delta en Entre Ríos”.

“Si mantenemos las medidas y un nivel alto de vacunación de segundas dosis, la cepa Delta va a circular pero no va a invadir para enfermar tanto y que haya pacientes internados”, concluyó.