River cerró el campeonato con una gran sonrisa: aplastó a Lanús por 4-1 en el Sur del Gran Buenos Aires, terminó el torneo Apertura en el cuarto lugar con 31 puntos y, como premio, comenzará el próximo Clausura fuera de los puestos de Promoción.
El primer tiempo el que hizo mejor las cosas fue el equipo dirigido por Juan José López. Ya desde el minuto mostró las garras con un Buonanotte inspirado que, en su función de mediapunta, estuvo dos veces a punto de vulnerar a Caranta con sendos zurdazos que se fueron apenas desviados.
Sin deslumbrar el visitante estaba más ordenado y era el único de los dos que arrimaba peligro, aunque siempre con poca profundidad y con remates de media distancia. Lanús, con la apuesta de juntar a varios jugadores de buen pie, apenas arrimaba hasta tres cuartos, donde morían contra Almeyda y Acevedo.
A los 28’, Roberto Pereyra llegó al fondo, sacó un hermoso centro para Erik Lamela, quien anticipó a su marcador y tocó al gol. El 1-0 era un premio merecido, pero a River le duró un suspiro por la ineptitud e irresponsabilidad del paraguayo Adalberto Román, quien metió la mano en su área y posibilitó el empate de Silvio Romero, de penal.
Pero River se levantó en el comienzo del complemento y con una ráfaga liquidó el partido. A los seis minutos, Román se redimió del error que le había costado el empate, ganó tras un córner y puso el 2-1. En la jugada siguiente, Pavone se adentró en el área, fue derribado por la torpeza de Hoyos y el ex Estudiantes cambió la infracción por gol, señala TyC Sports.
Con la desventaja Lanús adelantó sus líneas y tuvo algunas chances para descontar, pero Castillejos no estuvo en su tarde. A los 31, mediante una carambola, River cantó el cuarto: Caranta se demoró en rechazar una pelota y cuando lo hizo el balón rebotó en Pavone, que había ido a atorarlo, y se metió en el arco desguarnecido. Para el final sólo quedó tiempo para la tardía expulsión de Hoyos, quien se cansó de pegar, y cerró una tarde para el olvido.