
El médico Jorge Montiel presentó su renuncia al cargo de director del Hospital Centenario de Gualeguaychú. En una extensa carta que difundió a la prensa, explicó los motivos de su dimisión. Entre otros puntos, cuestionó que no se haya podido avanzar en la implementación del programa de salud anunciado al inicio de la gestión y fue crítico contra el sistema: “Lamento que el Ministerio de Salud siga siendo una estructura burocrática y obsoleta”, aseveró.
Según pudo saber ANÁLISIS, junto a Montiel, renunciaron también el médico Gustavo Levín y la bioquímica Leticia Siri, secretarios técnicos del nosocomio de referencia del sur provincial, que recibe derivaciones desde localidades como Gilbert, Urdinarrain, Larroque, Ceibas y otras, además de centros de salud de la región.
“Mi decisión de presentar la renuncia está motivada por el desgaste natural que enfrentamos quienes tenemos la responsabilidad de conducir instituciones complejas en escenarios difíciles”, introdujo Montiel, que había asumido en el cargo en diciembre de 2023, a pocos días de la designación de Guillermo Grieve como ministro del área.

“Pese a los logros de la gestión intrahospitalaria, no se ha podido avanzar a nivel regional y provincial en los objetivos planteados en el programa entrerriano de salud 2023-2027, el cual planteaba la conformación de una red interhospitalaria de acuerdo a los niveles de complejidad”, continuó Montiel.
“Lamento que el Ministerio de Salud siga siendo una entidad burocrática y obsoleta, donde los expedientes se acumulan y quedan olvidados sin respuestas oportunas”, aseveró luego.
“El sistema de salud provincial requiere transformaciones estructurales profundas y hasta ahora no he observado un compromiso real de avanzar en ese camino, más allá de expresiones de buena voluntad”, añadió el profesional, que pidió “abrir urgente un debate sincero sobre el modelo de salud pública que queremos construir”.
En la carta que distribuyó a los medios, el médico mencionó “las dificultades recibidas” y enumeró “una deuda significativa, con demora en los pagos a proveedores de seis meses, con falta de orden administrativo y de rendición administrativa de programa y subsidios desde 2021, una farmacia prácticamente sin stock, problemas edilicios graves en los dos edificios, riesgo eléctrico, caída de cielorraso, goteras, humedad, filtraciones de agua de lluvia y de la condensación de equipos de aire acondicionado mal instalados y contratos precarizados en un total de 281 con la dificultad en el pago de los mismos por el descalabro económico”.
También mencionó “la caída enorme en arancelamiento al comienzo de la gestión a partir de la resolución del gobierno nacional que dio de baja la Superintendencia de Salud” y destacó que “se pudo “avanzar en un proceso de sinceramiento, orden y equilibrio institucional, lo que permitió sanear las cuentas, dejando deuda cero para quienes asuman la conducción del hospital, lo cual es un hito histórico”.
“Hoy se deja una institución más ordenada, con bases sólidas para seguir creciendo y garantizando la calidad y la seguridad en atención. Con profundo agradecimiento y satisfacción a mi equipo que me acompañó en la gestión y a todo el personal comprometido de la institución. Una vez efectivizada mi renuncia, les deseo el mayor de los éxitos, a quienes continúan esta tarea tan difícil con los desafíos de todo tipo que se presentan en el día a día”, concluyó Montiel.