
Los suicidios en Entre Ríos en lo que va del año suman 120, lo que equivale a un promedio de un caso cada dos días. El año pasado se produjeron 150 muertes por esta causa, lo que significó un incremento del 20 por ciento con respecto a 2005. Una de las ciudades donde la problemática del suicidio es altamente preocupante es Paraná, donde 33 personas se quitaron la vida por decisión propia en 2007. Si bien los casos ocurrieron prácticamente en todos los departamentos entrerrianos (únicamente no hubo suicidios hasta el momento en el departamento Islas del Ibicuy), hay zonas o ciudades en los que los suicidios se dan con mayor frecuencia.
Las estadísticas señalan que cada cuatro intentos de suicidio, uno se concreta. En el 98 por ciento de los casos de intentos de suicidio se utilizan psicofármacos y la gran mayoría se da entre personas de entre 14 y 51 años de edad, de acuerdo con las estadísticas.
Para la psicóloga Paola Aguilar, presidenta de la Asociación Vínculos, el suicidio es “multicausal. No existe una causa única y son diversas las razones que pueden llevar a las personas a suicidarse. Pero la franja etaria que se da con mayor frecuencia es la que va de 17 a 30 años, particularmente en Paraná”.
Aguilar señaló, ante la consulta periodística que la depresión es una de las razones que inciden en que una persona decida quitarse la vida y destacó que desde la organización trabajan para conformar un comité de investigación sobre el tema. “Recién comenzamos a manejar estadísticas y lo que teníamos hasta ahora eran los datos que nos proporcionaban desde la dirección de Salud Mental de la provincia. Como asociación queremos manejar esos números”.
Consideró que el mayor problema de los adolescentes que podrían suicidarse es el aislamiento y advirtió que “los padres deben acercarse a hablar con ellos ni bien denotan un cambio de conducta”. El caso concreto se dio el viernes en Gualeguaychú, cuando Gonzalo Vera, un chico de 13 años, se quitó la vida.
Según las primeras investigaciones, el adolescente pasaba muchas horas solo, ya que su madre, que vive con un hombre que no era el padre de Gonzalo, es empleada de comercio y prácticamente no estaba nunca en la casa. “El chico se sintió solo, se deprimió, nadie notó el cambio de conducta y decidió quitarse la vida”, dijo a AIM una fuente policial.
En tanto, el director de Salud Mental Sergio Izza, coincidió con Aguilar y definió al suicidio como “multicausal”. Destacó que los adolescentes, en el rango que va de los 14 a los 19 y hasta los 24 años, son los más expuestos a conductas violentas.
“Los registros en todo el mundo indican que la prevalencia de muertes violentas, los porcentaje más elevados están en esa edad. En ese marco, el suicidio está dentro de las muertes violentas, pero también lo están los homicidios y los accidentes de tránsito. Esto marca una conducta de riesgo, segundo que es una franja con la que frecuentemente debemos insistir en los trabajos preventivos”, señaló.
El profesional advirtió que “en la cotidianeidad, parecería que la vida de los adolescentes para nosotros, los adultos padres, no forma parte de la categoría de lo que se simboliza como problemas. La gran mayoría de la sociedad considera problemas a otro tipo de situaciones como las cuestiones económicas, algún quebranto financiero, problemas bancarios o grandes conflictos conyugales. Parece que un adolescente que rompe su noviazgo o no anda bien en la escuela no tiene un problema, para nuestro punto de vista”.
Incidencias
Los profesionales coincidieron en que se le debe dar importancia y prestar mucha atención a los trastornos depresivos y de ansiedad en los adolescentes y jóvenes.
“La mayoría de los casos de trastorno social se inicia a edades muy tempranas. Son esos chicos timoratos, inhibidos, con mal carácter, que no comen una porción de pizza en un bar por miedo a pasar vergüenza; que no hablan con una chica porque no se animan o porque no se consideran aptos para hacerlo; se enrojecen y transpiran. Para conseguir una chica consume alcohol porque nota que lo desinhibe. Más del 60 % de ellos incrementa la potencialidad de riesgos suicidas con los trastornos descriptos y los depresivos, asociados con el consumo de tóxicos”, indicó Izza.
Por ello advirtió que los padres deben estar atentos ante determinados cambios de conducta en los hijos, ya que esta circunstancia denota que pueden estar en riesgo. “Un chico que cambió la conducta, un adolescente que está triste, que dejó de salir y que por oídos de aquellos que le prestan la oreja, se sabe que rompió un noviazgo. Es decir, algo que tocó a sus sentimientos; un fracaso, una mala relación con los padres. El ´ya vamos a charlar´ de los progenitores que no llega nunca. Eso denota que la comunicación está cortada entre padres e hijos y es una alerta”.
Izza resaltó que si bien los jóvenes están más expuestos a las conductas de riesgo, hay otras franjas que también son vulnerables, como las personas de la tercera edad. “Acá prevalece una cuestión de genero, con el hombre. Este es más vulnerable cuando llega a viejo, se queda solo o se jubila, o tiene una pérdida afectiva grande. En el caso de los viudos se incrementa la posibilidad de suicidios. Pero si se miran los números, se puede comprobar que los jóvenes son más vulnerables y van a la punta de cualquier estadística tanto en accidentes de transito como en homicidios; es decir, todo lo que son lesiones producidas por agentes externos”.
Datos escalofriantes
Una de las ciudades donde la problemática del suicidio es altamente preocupante es Paraná, donde 33 personas se quitaron la vida en lo que va del año. Le sigue Chajarí, en el departamento Federación, que durante 2007 un total de 15 personas se quitaron la vida, según fuentes de la Policía. Pero los números no son menos graves en otros departamentos: en 2007, en Gualeguaychú murieron 14 personas; 10 en Uruguay; nueve en Villaguay; siete en Concordia, seis en Federal y seis en Colón; cuatro en Nogoyá y cuatro en Gualeguay, tres en La Paz y tres en Feliciano, dos en Diamante y dos Victoria, uno en San Salvador y otro Tala. Sólo en Islas del Ibicuy no se produjeron suicidios hasta la fecha. El total asciende a 120, un dato que debe preocupar a la sociedad en su conjunto.
La prevención
El 10 de setiembre se conmemora el Día Mundial de la Prevención del Suicidio. Los profesionales que atienden esta patología destacan que la prevención del alcoholismo y la drogadependencia, factores que contribuyen a la baja de la autoestima e impulsa a las personas al suicidio, son claves para evitar este tipo de muertes. Cada año se suicidan en el mundo alrededor de un millón de personas y lo intentan entre 10 a 15 millones, lo cual significa que cada 40 segundos alguien comete suicidio, en tanto la tentativa ocurre cada tres segundos.
En Paraná, la asociación Vínculos y la línea telefónica de asistencia a la persona en crisis (135) llevarán a cabo una serie de actividades a fin de divulgar este servicio a la comunidad.