El combinado europeo jugó mejor que el conjunto oceánico y mereció la victoria, pero no supo liquidar el encuentro y lo pagó muy caro. Robert Vittek, en posición adelantada, abrió la cuenta a los cinco minutos del segundo tiempo con un cabezazo de pique al suelo y Winston Reid selló la igualdad en el tercer minuto de descuento, también por la vía aérea.
Eslovaquia se confío y resignó dos unidades que podrá lamentar mucho en un futuro cercano. Nueva Zelanda, por su parte, festejó el empate como un triunfo y no es para menos por la manera que lo consiguió.
Por lo visto en la primera jornada del Grupo F, Paraguay e Italia no deberían tener inconvenientes para avanzar a octavos de final, da cuenta TyC Sports.