A las 8.40 en la sala ingresó el tribunal presidido por Patricia Pérez, secundada por los jueces Martín Carbonell y Carolina López Bernis, donde los esperaban los fiscales Gustavo Castillo y Jorge Suñer por un lado, y los abogados defensores Pablo Garrera Allende (patrocinante de Álvarez) y Edwin Ives Bastian (abogado de Zapata).

La audiencia comenzó con los alegatos de apertura, siendo en primer término el fiscal Castillo quien detalló que para ese ministerio es posible la demostración de cómo sucedieron los crímenes de los menores que vivían en la vivienda de en Liebermann y 57 del barrio 80 Viviendas, en el extremo oeste de la ciudad de Concordia. En una causa caratulada como Doble Homicidio Calificado.

En un crudo relato, Castillo aseveró que de acuerdo a la evidencia, el padrastro de los nenes cometió el primero de los asesinatos en la primera quincena de enero del 2012, donde “abusándose de su fuerza y con crueldad golpeó con un elemento contundente en la nuca de Hugo Zapata”, provocándole la muerte para luego ocultar el cuerpo “debajo del piso de la finca”. Agregando allí que “todo eso en conocimiento de su concubina y madre (de la víctima) que no hizo denuncia alguna” y que colaboró con ocultar el cadáver.

Posteriormente, en la misma finca “y también aprovechándose de su fuerza física y con crueldad, le provocó golpes en la cabeza a Gustavo Zapata”, quien fallecería en el hospital Delicia Concepción Masvernat. Reiterando que también en este caso “era conocimiento de Andrea Zapata que no emitió denuncia”.

A ello sumó que los imputados “primeramente dieron versiones distintas de los hechos” y que en el caso del presunto autor material “fue apresado en la terminal, intentando fugar” en un micro de larga distancia hacia otra provincia.

Según publicó Diario Río Uruguay, el fiscal reconoció que finalmente la madre confesó como se habían dado los hechos, pero que en un primer momento “ocultó y colaboró” con el autor material de los crímenes. Criticándole que acusó “a Álvarez como autor de los hechos, aduciendo un supuesto riesgo de vida para ella y sus otros hijos”.