
José María López.
El 1º de diciembre de 2023, el juez de juicio Rafael Martín Cotorruelo, vocal del Tribunal de Juicios y Apelaciones de Paraná, refrendó un acuerdo de juicio abreviado y declaró al cura José María López autor material y responsable del delito de abuso sexual gravemente ultrajante agravado reiterado en tres hechos y lo condenó a la pena de 8 años y 6 meses de prisión de cumplimiento efectivo. Desde entonces, el sacerdote está alojado en la Unidad Penal de Paraná.
En las últimas horas, el Arzobispado de Paraná comunicó a las tres víctimas de los abusos del cura López que el Vaticano informó de la pérdida del estado clerical del sacerdote, “lo que significa que pierde todos los derechos y deberes propios de su vida sacerdotal y todo lo relacionado al estado clerical”.
En diciembre último, otro sacerdote condenado por abuso y corrupción de menores, Justo José Ilarraz, quedó en la misma situación. Fue expulsado de la Iglesia. Así lo determinó la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano luego de que el caso llegara a la Santa Sede producto de una serie de apelaciones a las sanciones canónicas que le había impuesto la Iglesia en Argentina. Ilarraz fue condenado en 2018 a 25 años de cárcel por los abusos a menores en el Seminario Arquidiocesano Nuestra Señora del Cenáculo, de Paraná. Estuvo, desde entonces, con arresto domiciliario en un departamento de calle Corrientes, al 300. Pero el 1º de julio de 2025 la Corte Suprema de Justicia de la Nación hizo lugar a un recurso extraordinario federal y entendió que los delitos que se le reprochaban habían prescripto y por eso mismo lo sobreseyó.
El cura José María López, cuyo último destino pastoral fue la parroquia Nuestra Señora de Luján, en Santos Domínguez y 4 de Enero, adonde llegó en 2018, condenado en juicio abreviado a la pena de 8 años y medio de cárcel bajo los gravísimos cargos de abuso sexual y corrupción de menores, pasa sus días en la Unidad Penal Nº 1, de Paraná, junto a otros 56 internos del pabellón Nº 19.
El proceso, que se llevó adelante en los Tribunales de Paraná bajo estricta reserva, culminó a principios de diciembre de 2023, cuando el juez Rafael Cotorruelo, vocal del Tribunal de Juicios y Apelaciones, refrendó el acuerdo de juicio abreviado, con lo cual el sacerdote aceptó haber cometido esos delitos y fue a parar a la Unidad Penal N° 1.
La causa, caratulada “López José María s/Abuso sexual gravemente ultrajante. Agravado”, fue tramitada por el fiscal Leandro Dato, de la Unidad Fiscal de Abuso Sexual y Violencia de Género.
El juez Cotorruelo, que refrendó el acuerdo de juicio abreviado, sostuvo en la sentencia que, “independientemente de la admisión expresa que ha efectuado el encartado en torno a la existencia material de los hechos ilícitos enrostrados y a la participación que tuvo en los mismos, he de adelantar que entiendo que en este proceso en el cual las partes han acordado el procedimiento abreviado, se reúnen los elementos de certeza necesarios para arribar a un pronunciamiento condenatorio, ya que los sucesos históricos que se describen han quedado demostrados racionalmente por las evidencias colectadas en la investigación penal preparatoria, las cuales tienen aptitud suficiente para hacer madurar en el plano intelectual el pleno convencimiento acerca de su existencia y de su autoría, comprobándose ambos extremos de forma tal que resultan evidentes”.
Una de las víctimas radicó la denuncia en la Unidad Fiscal de Violencia de Género y Abuso Sexual el 7 de agosto de 2023; antes, el 12 de febrero de 2023 había contado los hechos que se enrostraron al cura López ante el Moderador de la Comisión Judicial del Arzobispado de Paraná.
El 7 de agosto de 2023 también presentó la denuncia la segunda víctima del sacerdote ante la Unidad Fiscal de Violencia de Género. Diez días después.
El 17 de agosto, el arzobispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari, eleva informe a la Justicia “que contiene adjunto la declaración” de la primera víctima, realizada el 13 de mayo de 2019, y su declaración ante la curia el 12 de febrero de 2023.
El 29 de agosto de 2023, el Arzobispado pone en conocimiento de la Justicia de la presentación hecha por la tercera víctima de los abusos del cura que efectuara el 15 de agosto de 2023. Esa tercera víctima se presenta en la Unidad Fiscal de Violencia de Género y Abuso Sexual el 4 de septiembre de 2023.
Los hechos ocurrieron cuando las víctimas tenían entre 13 y 20 años, las situaciones de abuso ocurrían en las habitaciones del cura en los distintos templos donde estuvo destinado. Aunque se sospecha que no todos quienes soportaron su asedio sexual han presentado denuncias.
Uno de los hechos ocurrió en 1989. la víctima tenía entre 12 y 14 años cuando acompañaba al cura López a las celebraciones religiosas a una parroquia del interior de Entre Ríos. “Bajo el pretexto de la celebración de las misas los días sábados por la noche y domingo por la mañana, se alojaban en la casa parroquial. El cura, luego de forjar un vínculo de confianza, aprovechándose de la situación de encontrarse a solas con la víctima le efectuaba tocamientos en el pene, practicaba juegos sexuales simulando que el miembro era una palanca de cambio de auto, lo hacía bañarse junto a él e incluso dormir desnudo en la misma cama”.
Al cabo de ese juicio abreviado, el juez Cotorruelo declaró al cura José María López autor material y responsable del delito de abuso sexual gravemente ultrajante gravado reiterado por tres hechos y lo condenó a la penal de 8 años y 6 meses de prisión de cumplimiento efectivo y dispuso incorporar “el perfil genético” del sacerdote al Registro Provincial de Datos Genéticos y al Registro Nacional de Datos Genéticos.
(Fuente: Entre Ríos Ahora)