Se podrá decir que se dio la lógica o que David Ferrer volvió a ratificar el buen momento que atraviesa. Es indistinto. Lo cierto es que el español, número cinco del mundo y máximo candidato a quedarse con el ATP 250 de Buenos Aires, superó en la final a su compatriota Nicolás Almagro, campeón defensor y número 11 del mundo, por 4-6, 6-3 y 6-3, y se consagró en el Lawn Tennis Club.
En el arranque, Almagro sorprendió a su compatriota y se quedó con el primer set por 6-4. Sin embargo, con jerarquía y superioridad, Ferrer se recuperó y se llevó el tercero por 6-3, informa Cancha llena.
Con el partido 1-1, los nervios invadieron a Almagro, que, tras perder su saque en el inicio del set, golpeó su raqueta contra el piso, y Ferrer lo aprovechó. Con comodidad, brindó una clase de tenis, potenciada por el bajo rendimiento del rival, y cerró el partido con un cómodo 6-2.
En primera rueda, Ferrer superó al argentino Andrés Molteni. Luego, en octavos, despachó a Facundo Bagnis, otro local. Después, le llegaría el turno al chileno Fernando González. Y ante David Nalbandian consiguió el pase a la final, en la que perdió el único set de todo el torneo.